Post by Red Azrael on Jul 4, 2013 8:19:56 GMT 2
La vida no siempre se entiende, despues de todo ahi reside la belleza y delicia que esta representa para todo aquel que la vive o sufre a diario.
Miles de criaturas desde titanicas bestias hasta la mas diminuta hormiga, se han encontrado en las grandes encrusijadas que esta "vida" les ofrece e impone a diario...
Todavia recuerdo el dia de mi gestacion, fuimos creados con un proposito simple y marcado...eliminar y crear, vida y muerte.
Dos caras opuestas de una misma moneda, sin embargo a veces puede salir una tercer cara, una que tenga un objetivo extra a parte de seguir esa eterna danza que nuestra raza viene bailando desde el dia de su evolucion final.
**********************
La oscuridad que venia invadiendome desde que tenia memoria ceso de repente, y algo que nunca antes habia visto aparecio ante mi.
Luz...en el mundo exterior, lo primero que recuerdo es la cabeza de un enorme ser que gritaba y no dejaba de ladear la cabeza de un lado a otro.
En cuanto me percate, vi a varios de mis hermanos que se habian abrazado al rostro de otros seres similares. instintivamente me inyecte en el.
Y el resto fue tiempo muerto,me encontre con una tierna raf*ga de calor que provoco que cayese rendido ante el sueño.
Pude ver imagenes placenteras dentro de mi mente, del ciclo natural...nacimiento, crecimiento y muerte. Tambien oia los pensamientos dela gran madre venir ante mi durante mi sueño astral,sin dejar de repetir la mision de los nuestros.
" matar....crear....matar....crear..." - nuestra unica obligacion, el unico anhelo, una y otra vez hasta grabarlo a fuego en mi mente, Mi gran proposito.
En cuanto el ultimo rugido mental de la reina resono a mi alrededor, desperte y comenze a moverme desesperado. El lugar parecia muy pequeño de repente, ya no cabia por completo. trate de salir cuidadosamente dando unos golpecitos con la cabeza, pero ni si quiera bastaba para raspar.
Un sentimiento nuevo para mi comenzo a brotar de la nada, algo que ahora se que se conoce como "ira". Sin saber si quiera que podia hacerlo empeze a masticar la pared carnosa que yacia delante de mi, la cual comenzo a seder poco a poco...me cansaba por momentos pero la propia caustrofobia hacia que siguiera adelante, no paso ni un minuto y volvi a ver la luz.
Mi primer chillido como "revientapechos" hizo un macabro dueto con una voz que grito de dolor al mismo tiempo. Era el ser que habia abrazado unas horas antes. Una vida a cambio de una muerte, era el precio por hacer que la colmena prosperara.
Me desenrrolle desde dentro de sus costillas y baje empapado en la sangre de aquella insignificante incubadora. Entonces sucedio...
Mis hermanos comenzaron a olfatear para todos lados freneticos, ladeando sus gigantescas y ovaladas cabezas de un lado a otro. Fue entonces cuando su rastro los guio hacia....los guio hacia mi...Me habia percatado que yo no era como los otros en la colmena.
Al lograr verme mejor pude notar que poseia un extraño tono de piel amarilla, que no presentaban los otros revientapechos. El resto de la colmena parecia estar confusa, La reina entonces lanzo un rugido determinante. Me di cuenta que yo ya no podia entenderle en nada, desde aquel momento no eran mas que rugidos de bestia como el resto de mis hermanos...
Con un movimiento rapido esquive mi pequeño y serpenteante cuerpo amarillo a tiempo para esquivar el ataque de la oscura cola de uno de mis hermanos. Ni si quiera lo cuestione, solo me enliste y comenze a deslizarme lo mas rapido posible para encontrar la salida... Los guerreros de la colmena se me lanzaban intentando cazarme ya sea con sus bocas internas o lanzandome coletazos. Logre meterme a un hoyo justo a tiempo ya que las fauces de un corredor estaban a un centimetro de darle un fin a mi temprana existencia.
Escape de mi antigua colmena, y me encontre por primera vez con aquellas criaturas llamadas "humanos". Tenian una piel impenetrable la cual podian quitarse y ponerse a voluntad...segun los recuerdos de mi anfitrion era algo que usaban para protegerse de nosotros, de nuestra sangre.
- ¿hey donde vas pequeñin? - exclamo uno de ellos mientras me recogia con una cupula transparente y me levantaba.
Una hembra de la especie aparecio escoltada de dos machos mas.
- ¿Joder Erick como llego hasta aqui? .-
- eso no importa Jessica, nos facilito el trabajo de recoger a uno de sus hermanos mayores...pero...algo anda mal con este...-
- es un Revientapechos standart,solo metelo a la nave a la celda cuarenta y dos y ya esta cabronazo. - le exigio la mujer, mientras los otros dos machos miraban sin intervenir en lo mas minimo. Ellos tambien habian notado mi piel amarillenta que diferia a la de mis hermanos.
Durante las siguientes horas, me colocaron en una nave espacial que hiba rumbo a un planeta llamado "tierra" al parecer estos humanos se parecian mucho a las incubadoras que nosotros usabamos para procrearnos. Solo que eran de colores mas claros.
Estaba entre cuatro paredes impenetrables para mi, mi exoesqueleto ya se habia desarrollado debido a algunos pequeños mamiferos que me ofrecieron. La diferencia no se habia acabado ahi...no...en cuanto las horas pasaron y mi piel se habia transformado en la de un zangano adulto...
Me entere de la verdadera razon de mi exilio, pensaba al principio que la reina me habia confundido por mi pigmentacion amarilla, pero habia mas que un simple color...
feromonas eran totalmente diferente a las de mis hermanos, mis genes y mi mente eran totalmente independientes del control de la reina y como posible amenaza debia ser destruido. Mire mis manos, mi cuerpo y me percate que ahora poseia un exoesqueleto rojizo que diferia totalmente con el resto de los xenomorfos convencionales. Podia tener diferentes tonalidades y variaciones en todo mi cuerpo pero siempre era el mismo color.
Un hombre se acerco a mi con una larga bata de laboratorio, desde el otro lado del impenetrable cristal claro. Me miro con una satisfactoria sonrisa y coloco su mano apuntando hacia mi cabeza como si estuviera acariciandome atravez del vidrio.
- esperamos varias cosas de ti..."diablo"...- exclamo para luego darse vuelta y abandonar la habitacion dejando a solo dos cientificos a cargo.
Numero: 93
Nombre codigo: "diablo"
Miles de criaturas desde titanicas bestias hasta la mas diminuta hormiga, se han encontrado en las grandes encrusijadas que esta "vida" les ofrece e impone a diario...
Todavia recuerdo el dia de mi gestacion, fuimos creados con un proposito simple y marcado...eliminar y crear, vida y muerte.
Dos caras opuestas de una misma moneda, sin embargo a veces puede salir una tercer cara, una que tenga un objetivo extra a parte de seguir esa eterna danza que nuestra raza viene bailando desde el dia de su evolucion final.
**********************
La oscuridad que venia invadiendome desde que tenia memoria ceso de repente, y algo que nunca antes habia visto aparecio ante mi.
Luz...en el mundo exterior, lo primero que recuerdo es la cabeza de un enorme ser que gritaba y no dejaba de ladear la cabeza de un lado a otro.
En cuanto me percate, vi a varios de mis hermanos que se habian abrazado al rostro de otros seres similares. instintivamente me inyecte en el.
Y el resto fue tiempo muerto,me encontre con una tierna raf*ga de calor que provoco que cayese rendido ante el sueño.
Pude ver imagenes placenteras dentro de mi mente, del ciclo natural...nacimiento, crecimiento y muerte. Tambien oia los pensamientos dela gran madre venir ante mi durante mi sueño astral,sin dejar de repetir la mision de los nuestros.
" matar....crear....matar....crear..." - nuestra unica obligacion, el unico anhelo, una y otra vez hasta grabarlo a fuego en mi mente, Mi gran proposito.
En cuanto el ultimo rugido mental de la reina resono a mi alrededor, desperte y comenze a moverme desesperado. El lugar parecia muy pequeño de repente, ya no cabia por completo. trate de salir cuidadosamente dando unos golpecitos con la cabeza, pero ni si quiera bastaba para raspar.
Un sentimiento nuevo para mi comenzo a brotar de la nada, algo que ahora se que se conoce como "ira". Sin saber si quiera que podia hacerlo empeze a masticar la pared carnosa que yacia delante de mi, la cual comenzo a seder poco a poco...me cansaba por momentos pero la propia caustrofobia hacia que siguiera adelante, no paso ni un minuto y volvi a ver la luz.
Mi primer chillido como "revientapechos" hizo un macabro dueto con una voz que grito de dolor al mismo tiempo. Era el ser que habia abrazado unas horas antes. Una vida a cambio de una muerte, era el precio por hacer que la colmena prosperara.
Me desenrrolle desde dentro de sus costillas y baje empapado en la sangre de aquella insignificante incubadora. Entonces sucedio...
Mis hermanos comenzaron a olfatear para todos lados freneticos, ladeando sus gigantescas y ovaladas cabezas de un lado a otro. Fue entonces cuando su rastro los guio hacia....los guio hacia mi...Me habia percatado que yo no era como los otros en la colmena.
Al lograr verme mejor pude notar que poseia un extraño tono de piel amarilla, que no presentaban los otros revientapechos. El resto de la colmena parecia estar confusa, La reina entonces lanzo un rugido determinante. Me di cuenta que yo ya no podia entenderle en nada, desde aquel momento no eran mas que rugidos de bestia como el resto de mis hermanos...
Con un movimiento rapido esquive mi pequeño y serpenteante cuerpo amarillo a tiempo para esquivar el ataque de la oscura cola de uno de mis hermanos. Ni si quiera lo cuestione, solo me enliste y comenze a deslizarme lo mas rapido posible para encontrar la salida... Los guerreros de la colmena se me lanzaban intentando cazarme ya sea con sus bocas internas o lanzandome coletazos. Logre meterme a un hoyo justo a tiempo ya que las fauces de un corredor estaban a un centimetro de darle un fin a mi temprana existencia.
Escape de mi antigua colmena, y me encontre por primera vez con aquellas criaturas llamadas "humanos". Tenian una piel impenetrable la cual podian quitarse y ponerse a voluntad...segun los recuerdos de mi anfitrion era algo que usaban para protegerse de nosotros, de nuestra sangre.
- ¿hey donde vas pequeñin? - exclamo uno de ellos mientras me recogia con una cupula transparente y me levantaba.
Una hembra de la especie aparecio escoltada de dos machos mas.
- ¿Joder Erick como llego hasta aqui? .-
- eso no importa Jessica, nos facilito el trabajo de recoger a uno de sus hermanos mayores...pero...algo anda mal con este...-
- es un Revientapechos standart,solo metelo a la nave a la celda cuarenta y dos y ya esta cabronazo. - le exigio la mujer, mientras los otros dos machos miraban sin intervenir en lo mas minimo. Ellos tambien habian notado mi piel amarillenta que diferia a la de mis hermanos.
Durante las siguientes horas, me colocaron en una nave espacial que hiba rumbo a un planeta llamado "tierra" al parecer estos humanos se parecian mucho a las incubadoras que nosotros usabamos para procrearnos. Solo que eran de colores mas claros.
Estaba entre cuatro paredes impenetrables para mi, mi exoesqueleto ya se habia desarrollado debido a algunos pequeños mamiferos que me ofrecieron. La diferencia no se habia acabado ahi...no...en cuanto las horas pasaron y mi piel se habia transformado en la de un zangano adulto...
Me entere de la verdadera razon de mi exilio, pensaba al principio que la reina me habia confundido por mi pigmentacion amarilla, pero habia mas que un simple color...
feromonas eran totalmente diferente a las de mis hermanos, mis genes y mi mente eran totalmente independientes del control de la reina y como posible amenaza debia ser destruido. Mire mis manos, mi cuerpo y me percate que ahora poseia un exoesqueleto rojizo que diferia totalmente con el resto de los xenomorfos convencionales. Podia tener diferentes tonalidades y variaciones en todo mi cuerpo pero siempre era el mismo color.
Un hombre se acerco a mi con una larga bata de laboratorio, desde el otro lado del impenetrable cristal claro. Me miro con una satisfactoria sonrisa y coloco su mano apuntando hacia mi cabeza como si estuviera acariciandome atravez del vidrio.
- esperamos varias cosas de ti..."diablo"...- exclamo para luego darse vuelta y abandonar la habitacion dejando a solo dos cientificos a cargo.
Numero: 93
Nombre codigo: "diablo"