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Post by srtd on Jan 31, 2013 1:40:02 GMT 2
Vaya si que me perdi de mucho je je je.
Pero bue al menos pude ponerme al dia y mira nada mas que giros dio la historia, la joven reina se porto un poco egocentrica y confiada lo que permitio la capturaran y bue al parecer los humanos se ganaron un poco mas de tiempo je je je.
Sin Aztak la batalla hubiera terminado hace mucho gracias a la desespesperacion de Arkantos ahora los Locuts peudne regresar a la pelea.
Ahora si se pedue decir que se esta cerca del final, disculpa la tardanza lifa espero por la conti.
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Post by Spiritual Gaia on Feb 11, 2013 19:30:44 GMT 2
CAP 20
Muerte en la familia.
Canales de agua 2:22 a.m.
La enorme sombra de un ser hectomorfico se agacha donde se encontraba los restos de un enfrentamiento, entre humanos y Locust. Estaba rastreando las pisadas de sangre, para saber que camino debía tomar. Era Arkatos quien le seguía el paso al grupo de Nahrek. Pero conforme iba avanzando se iba dando cuenta que el aroma a sangre de sus hermanos se hacía más fuerte. Acelero sus pasos investigando encontrando lo que temía.
Una zona con derrumbe confirma el aroma. Varios humanos sepultados con Locust por igual, toca la pólvora, aun estaba tibia. El derrumbe fue causado por una detonación, varios quedaron sepultados, la oscuridad apenas dejaba ver la sangre salpicada en las paredes y piso, cubierto de escombros, pero reconoció de entre los sepultados uno de armadura blanca manchada de sangre. ¿Había fracasado el plan?
Una hora con siete minutos antes. Canales de agua 1:29 a.m.
Krashtar – ¡Muévanse! ¡Ya casi estamos cerca de la superficie!
El grupo corre llegando a la planta de Agua. Los estaban esperando. En desventaja son rodeados desde los barandales por el grupo de Luinha, se les ilumina con reflectores al grupo de Nahrek. Se ponen de espaldas en guardia apuntando a los humanos. Se oye alguien hablando.
Luinha – ¿Eh? Pero que tenemos aquí... Ratas que se salieron de su tubería. Tengo que admitir que llegaron lejos traspasando todos nuestros controles en el subterráneo, pero me parece que ahora mis muchachos y yo tenemos ventaja.
Nahrek gruñe mostrando sus afilados dientes agresivamente apuntando a Luinha.
Luinha – Pensé que vendrían mas de ustedes a rescatar a su Reina.
Todos se miran entre si en especial Krashtar a su hermano, pero Nahrek no quita la vista de Luinha. En susurros se contestan ambos.
Nahrek – Esto cambia las cosas.
Krashtar – El General nos envió para eliminar las defensas de esta ciudad, ¿pero la Reina?. No podemos fallar ahora.
Nahrek – Ahora sabes porque traemos a la humana.
Luinha – Suficiente platica. ¡Abran fuego!
Ambos bandos empiezan la ofensiva y los Locust mientras disparaban buscaban cobertura.
Nahrek – Hermano, apunta a las bombas de agua detrás de ellos.
Así lo hacen debilitando las bombas de agua, las grandes placas metálicas empiezan a expandirse perdiendo la resistencia, hasta que estallan, soltando el agua fuertemente, tirando a algunos humanos hasta la parte baja. En ese momento cuando se cambiaban de posición los humanos que aun estaban en la parte superior, Nahrek ordena algunas de sus tropas a entrar en la instalación, para flanquear a los humanos. Krashtar toma la iniciativa adentrándose a la Planta con algunos empezando a matar a los rezagados por la corriente de agua suelta.
Luinha reagrupa a sus hombres rodeando la cobertura de Nahrek. Un tiro roza la bolsa de piel en la espalda del Theron, oyéndose el grito de la niña. Inmediatamente se pone de frente Nahrek interponiéndose entre las balas, recibiendo una en un costado. Se resiste a caer recibiendo otra en un hombro. Se mueve entrando a la planta de agua, ya dejando ver la sangre goteando, solo para cubrir a la niña del tiroteo.
Krashtar ve lo que paso tratando de acercarse al grupo de Luinha y matar a uno de sus hombres que lastimo a su hermano. El piso estaba cubierto de agua fluyendo, haciéndolo traicionero. Avanzaba con dificultad por la presión de la misma pero en un estallido de adrenalina corre embistiendo a los humanos que disparaban a su hermano y volarlos a escopeta, dejando regado las extremidades.
Personalmente Luinha se acerca a Krashtar tecleándolo, ambos caen soltando sus armas y el agua las cubre de inmediato. Sin perder el tiempo buscándola, Krashtar suelta un puñetazo a Luinha haciéndolo retroceder y casi caer por el barandal. Sus hombres lo defienden hiriendo al Granadero en un brazo. Krashtar retrocede escondiéndose, uno de sus Locust le provee de una nueva arma emprendiendo el tiroteo nuevamente.
Luinha - ¡Retrocedan, muchachos! ¡Se esta inundando el lugar!
Así lo hacen también los Locust, Krashtar corre a donde su hermano. Aun estaba vivo, sentado recargado en la pared, revisando a la niña.
Nahrek – Esta niña no volverá a ver con un ojo.
La niña lloraba mientras Nahrek le limpiaba el ojo con agua de una cantimplora suya, la sangre escurría igual que las lagrimas de la niña.
Krashtar – Hermano estas sangrando.
Nahrek – Igual que tu.
Aprieta con su mano la herida de su brazo el granadero.
Krashtar – No a sido nada.
Ríe el Theron, terminando de curar a la pequeña. Con esfuerzo se pone de pie.
Nahrek – Informe.
Krashtar – Solo quedamos cuatro.
Nahrek – Tan mal esta esto... Tenemos que continuar.
El mismo Nahrek se va quedando atrás, Krashtar lo toma de un brazo y le ayuda a caminar mejor. Continúan sus paso, igual que Ciba a pie detrás de ellos; avanzan ya con poca munición solo reabasteciéndose de los soldados que mataron y de sus demás hermanos caídos.
Por otro lado Luinha y sus hombres reagrupándose. Empiezan a contar las bajas que no fueron excesivas.
Luinha – Estas larvas saben pelear mejor que con todas las demás que me he topado. Bueno perdimos a cinco buenos hombres, pero solo deben quedar apenas tres o cuatro Locust vivos.
Soldado – Deberíamos regresar a acabar con ellos.
Luinha - Si quieren llegar hasta el exterior tendrán que seguir este camino, así que soldado habrá que regresar por ese pasillo y esperarlos ahí. De todas formas la Planta se esta inundando, eso los obligara a venir por aquí. ¡Bueno hombres, regresemos a acabar con ellos!
Nerviosos pero decididos se adentran por la oscuridad a por los rezagados.
Estanques de purificación a 1.7 Km. del Cuartel de Ginesa. 1:51 a.m.
Krashtar – ¡Vamos Nahrek! Ya estamos muy cerca. No te atrevas a detenerte.
Nahrek – Me estoy convirtiendo en peso muerto yo.
Krashtar – ¡No digas tonterías! ¡Muévete!
Centinela – Mis señores, la presencia humana se esta acercando nuevamente. Si no nos damos... (Una bala atraviesa el cuello del Centinela matándolo.)
Krashtar sin soltar a su hermano dispara con la mano que le queda libre. Nahrek ordena a la niña esconderse.
Nahrek – ¡Dame mi arma, Krashtar!
Ambos hermanos hombro a hombro disparan con un ultimo frenesí de supervivencia, aun así el enemigo avanzaba, obligando al granadero salvaje a hacerse para atrás, lamentablemente Nahrek se quedo adelante. Su hermano poniéndose a cubierto se percata tarde de el.
Krashtar - ¡Nahrek, RETROCEDE!
Su hermano voltea ligeramente susurrándole apenas.
Nahrek – Ya no puedo.
Múltiples impactos sufrió el Theron salvaje, su armadura blanca se tornaba roja con cada bala que lo atravesaba pero no cedía, seguía disparando también causando bajas en los humanos. Los obligo a buscar cobertura al fondo del pastillo temporalmente. Ya habiendo perdido demasiada sangre, cae en seco al suelo manchando la pared mientras tosía sangre.
Krashtar y Ciba corren donde estaba. Su hermano lo arrastra detrás de la esquina solo para contemplar toda su armadura blanca llena de sangre de su hermano.
Nahrek – Creo que ahora soy peso muerto ¿Verdad?
Krashtar no dice nada, el Theron seguía tosiendo sangre y su voz se oía ahogada por la misma razón. Nahrek le da la mano despidiéndose de su hermano, y conteniéndose, Krashtar fuertemente sujeta su mano.
Krashtar – Hemos fallado, Nahrek.
Nahrek – No... Yo falle. Mi muerte es... inevitable. Tienen que regresar a la... planta de agua. Debe haber otro camino por ahí.
Krashtar – Pero...
Nahrek – Hazlo. Llévate a la niña, ella será la clave para liberar a la Reina... Antes de dejar las armas me despediré de los humanos... Tuvimos una buena vida, hermano.
La pequeña tenia agachada la cabeza solo asustada y llorando. Krashtar se despide de su hermano no queriéndolo soltar.
Nahrek – ¡Vete! Es una orden.
Krashtar gruñe y se lleva a la niña. Regresando a la planta. Los soldados ven correr a al Granadero cargando algo y van tras el. Cuando se acercan a la esquina se escuchando los susurros de alguien. Sus lámparas iluminan el cuerpo y el lugar lleno de sangre. Se percatan que aun estaba vivo y con una granada en la mano.
Nahrek – Hasta nunca, hermano.
El Theron hace estallar la Granada derrumbando el lugar llevándose consigo a algunos humanos. Finalmente llego a ser su tumba.
Canales de Agua - 2:24 a.m.
El Kantus busca en los escombros pero solo encontró cadáveres humanos y el de tres Locust incluyendo el de Nahrek. Quita los escombros en busca del otro granadero y la niña pero no los encontró. Toca las piedras susurrando por el descanso de sus hermanos, quedándose un momento donde fue su sepultura. Una vez pasado unos minutos busca el rastro del granadero.
Busca en la planta de agua que seguía escurriendo agua, hallando el rastro en una ventilación de aire. La sangre que goteaba era Locust pero se preocupo al ver también de humano. Arrastrándose por la pequeña ventilación se mueve siguiendo el rastro de sangre.
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Post by xenovelvet on Feb 11, 2013 23:03:02 GMT 2
Mmmmmmm una baja importante por parte De los locust y ciba perdio un ojo............ Creo saber que va a pasar pero no creo que lo dejes ser predecible..... Modo stand by activado.
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Post by srtd on Feb 13, 2013 23:01:52 GMT 2
Ya la cosa esta interesante, aun hay oportunidad para las ordas locust, Ciba sigue viva y es la que peude buralr la seguridad y gracaisa que Amrya robo la tarjeta de acceso de la comandate humana esta podra escapar e inclusive dejar sin defensas a la base je je je.
Note que a diferencia de la mayoria de los juegos en esta historia las mujeres tienen roles muy importantes, lo cual le da un buen toque de diferenciacion.
En fin lifa espero por la conti je je je.
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Post by Spiritual Gaia on Feb 18, 2013 20:53:42 GMT 2
CAP 21
Enemigo Interno
Ciudad Ginesa - 2:46 a.m.
La niña sale fácilmente de las ventilaciones hasta el exterior viendo varias partes de la ciudad iluminada y en el cielo los enjambres chillando. Varios Helicópteros patrullan con reflectores la ciudad. Haciéndole difícil a cualquier enemigo escabullirse.
Krashtar – ¿Aun te duele?
Ciba – Claro que si. Cuando trato de abrirlo siento un poco de sangre saliendo todavía.
Krashtar – No lo toques. Deja que sangre, de apoco cerrara. Ahora se me a rebajado a cuidador de cría... que humillación.
Ciba – Pues para que lo sepas, se cuidarme sola. Mucho antes que mi amo me adoptara yo ya vivía sola, para que lo sepas.
Krashtar – Agrh. Mi hermano y yo también nos habíamos criado solos. Pero dudo que lo comprendas, ver miles morir a tu alrededor. No es algo que se quisiera conocer.
Ciba – Se llevaban bien ¿verdad?
Krashtar – Mas que bien. Aunque estábamos solos siempre cazábamos juntos. El siempre decía que éramos los mas fuertes y que por eso solo nosotros dos sobrevivimos al genocidio.
Ciba – ¿Genocidio?
Krashtar – Mucho antes de tu nacimiento. Nosotros éramos apenas crías, Nahrek era mi único hermano y el mayor. Vivíamos en los paramos desolados, un lugar donde no abundaba nada. Desde pequeños trabajábamos duro dentro de los túneles. Un día la tragedia sucedió, al principio sentimos que nuestra carne se quemaba, y durante ese momento, aun pequeños, salimos para ver que sucedía. Todos empezaban a caer, como si los mataran por dentro. Nosotros por el dolor caímos pero de un tiempo nos levantamos, solo quedando Nahrek y yo vivos.
Ciba - ¿Y que paso después?
Krashtar – Después encontramos a la Hondo.... Ya te respondí suficiente. ¡Muévete!
Ciba – Hay que carácter. ¿Bueno y cual es el plan? Por donde nos moveremos. Aun hay muchos en la entrada de ese lugar.
Krashtar - ¡Agáchate! Por ahí es donde debimos haber salido. Era suicidio seguro.
Ciba – ¡Ese que esta saliendo quien me disparo a mi ojito!
Krashtar – Cállate, te oirán con tus gritos. Maldición es el mismo que nos atrinchero. Sobrevivió ese maldito come suelos a mi hermano.
Entrada Planta de Agua Ginesa – 2:51 a.m.
Varios soldados están reunidos. Sacando a los sobrevivientes. Hasta el ultimo sale Luinha, lleno de polvo y sangre.
Luinha – ¡Cough, Cough! Ya estoy viejo para esto. ¡Cough, Cough! Esas estúpidas larvas acabaron casi con mis hombres.
Soldado – Señor, esta herido. Lo llevaremos al hospital.
Luinha – No me vengas con esa porquería. ¡Estoy bien! Solo necesito mi hermosa botella, un cigarrillo y un baño. Quítense de mi vista si no les meto un tiro, tengo que llegar donde esta la comandante.
Mientras se sacude el polvo y prende su cigarro, se marcha al cuartel, sus demás hombres restantes se quedan siendo atendidos por los médicos.
Sin perder tiempo ambos siguen a Luinha por entre las devastadas calles, llenas de escombro. Para la niña era mucho mas fácil seguirle la pista pero Krashtar se esforzaba por no ser visto. Evadiendo reflectores y adentrándose por los edificios para irse acercando. Finalmente Luinha se detiene y detrás de los escombros Ciba lo observa mientras Krashtar recuperaba el aliento.
Ciba – Hay mucho solados ahí, pero como vamos a entrar. Además no se si hay este la Reina. Oye por cierto ¿como es la Reina?
Krashtar – No puede ser. Es obvio que sabrás quien es cuando la veas.
Ciba – ¿Seguro que estará viva?
Krashtar – Aquel humano lo a mencionado.
Ciba – Bueno este lugar parece muy difícil entrar, aunque tengo una idea.
Cuartel Ginesa 3:10 a.m.
Un soldado rondando haciendo guardia empieza a oír alguien llorando. Quita el seguro del arma y se va acercando, pide a otro soldado que lo acompañe. Avanzan y buscan dentro del edificio con mucha cautela y el llanto se va haciendo mas fuerte. Y en un rincón ve a una niña llorando y gritando por su madre.
Los soldados bajan las armas y se acercan a la pequeña, uno hace guardia y el otro va a por la niña. Mira, levanta su cara y ve el vendaje en uno de sus ojos.
Soldado – Hey pequeña. ¿Qué te ha pasado? ¿Qué haces aquí?
Ciba – Estoy buscando.
Soldado - ¿Buscando? ¿Aquí sola? ¿Y a quien buscas?
Krashtar – ¡A ustedes!
El granadero por detrás del que tomaba guardia, lo toma del cuello y se lo rompe, se mueve rápido golpeando al que se encontraba agachado tomando su propia arma, la pone en su estomago y dispara, matándolos silenciosamente. La niña se limpia la cara y se levanta.
Ciba – Te dije que funcionaria. Ahora sigue ponerte su ropa.
Krashtar – No esperaras que yo...
Ciba – Vamos, ¿quieres pasar sin que te vean?
Una radio empieza a sonar de uno de los cadáveres.
Radio – Reporte , pelotón. ¿Cual es su estado?
No saben que hacer ambos, si no hacían algo la situación se comprometería. La niña corre y habla por la radio.
Radio – ¿Pelotón? Envíen unidades a inspeccionar. ¿Pelotón, me recibe?
La niña finge llorar, otra vez.
Ciba – ¡¿Hola?! ¡Hay un hombre aquí herido y hay varios monstruos aquí dentro!¡Ayúdenme por favor!
Radio – Mantenga la calma, mandaremos tropas.
La pequeña apaga la Radio.
Ciba – Ves hay que esconder a uno.
Gruñe molesto el Granadero pero sabiendo que tenia razón, lo hace.
Cuartel Ginesa - 3:23 a.m.
Luinha – ¡Eh! Brenda, ya me hice cargo de esas bestias.
La comandante revisaba algunos planos, tras el incidente de los Canales.
Alrich – Veo que te costo.
Luinha – Solo un poquillo... La verdad ya me hice viejo para esto. ¿Y que a pasado con las demás larvas fuera de la ciudad?
Alrich – No lo se. Su general no a dado la cara. Sabe que la tenemos y parece ser que no se arriesgara. Lo que me preocupa es esos nuevos túneles que se mencionaron. Este piso es resistente pero no estoy segura que sea aprueba de Locust.
Uno de comunicaciones interrumpe.
Operador – Comandante, tenemos un reporte de un incidente a 700 metros de nuestra posición.
Alrich - ¡¿Qué?! ¡¿A setecientos metros?! ¿Esta seguro?
Operador – Si pero no parecen ser Locust, señora. Quizás sean solo unos infames.
Alrich – No arriesgare la situación, pon francotiradores en los edificios cercanos y manda un escuadrón.
Operador – Si, comandante.
Alrich – Espero que estés seguro de haberlos matado a todos, Thomas.
Luinha – Pues se derrumbo todo ese lugar. Si hubieran sobrevivido fue por mero milagro. Además tu bien sabes que no pudieron salir por la planta de Agua. La entrada estaba literalmente armada hasta los dientes.
Ruinas – Centro Ginesa – 3:42 a.m.
Líder de Pelotón Zulú – Control, aquí pelotón estamos entrando al edificio.
Francotirador – Aquí pelotón Alpha, en posición. Tenemos poca visibilidad del objetivo. Zulú trabaja en reconocimiento.
Control – Mantén tu posición, Alpha. Zulú dirígete dentro del edificio en el sector E. La señal de radio fue detectada en esa zona.
Zulú – Afirmativo, control. Los mantendremos informados.
Los soldados entran al edificio formados y organizados, uno detrás del otro. Conformen avanzan observan varios rasguños y salpicaduras de sangre. Cautelosos se aseguran que la zona este limpia.
Zulú – Tenemos señales de un enfrentamiento menor, control. Parece ser que son bestias pequeñas por los rasguños, no se detecta casquillos de munición. Espere... tenemos contacto. Encontramos al objetivo civil.
Control – Comprendido. Estado del civil.
Zulú – Heridas leves. Parece ser que a perdido un ojo. Solicitaos permiso para llevarla al cuartel.
Control – Solicitud aceptada. Ya hay médicos esperando.
Alpha – Aquí Alpha, tenemos visión de alguien mas en el mismo piso, en el ala este. Es de los nuestros. Equipo Zulú verifique.
Zulú – Comprendido.
El equipo se divide en el piso del edificio buscándolo, hay mas sangre en esa zona. Avanzan hasta hallarlo, un soldado pegado a la pared aparentando una herida en el brazo que seguía sangrando. El otro soldado ya había muerto.
Zulú – Aquí zulú a Alpha. Es un soldado de reconocimiento. También lo llevaremos al cuartel. Requiere asistencia medica, parece que se le a lastimado gravemente un brazo y el cuello.
El escuadrón se retira con ambos sujetos hasta el cuartel para que recibieran atención medica.
Puesto de avanzada Locust – 3:42 a.m.
Guardia Real – Mi señor, ya han llegado las tribus.
Aztak – Has pasar a sus Jefes.
Entran un total de doce distintos Locust. Siete Shamanes Kantus, dos salvajes Boomers, un cazador salvaje, domador de bestias y por ultimo un salvaje granadero de elite. Todos en la misma tienda al servicio del General.
El primero en hablar es uno de los Shamanes.
Gog’dem – Ya hemos sido enterados de los acontecimientos recientes, general.
Otro Shaman habla igualmente.
Tamaraw – Tienen a su Reina, por lo que hemos escuchado. Parece que nuestro hermano Arkatos se precipitó en el ataque.
Aztak – El aun es muy joven, tiene que aprender de los errores cometidos.
Tamaraw – Esperemos que así sea.
Los lideres Boomers hablan con su tonalidad grave y lenta, como les caracteriza.
Grash – Aun mantenemos nuestra palabra. La tribu de Grash estará lista en una hora para la artillería pesada.
Continua el otro en un tono similar.
Mog – Mientras el objetivo sea los come suelos, sacare el mejor armamento que nos queda. Me encargare de suministrar armas y munición a todo el ejercito, General.
Aztak – Distribuiremos a toda la artillería alrededor de esta ciudad. Pero no comprometeré el bienestar de la Reina.
Otro Shaman habla.
Hudag – Si ponemos como prioridad a su Reina, el plan puede fracasar. No podemos darnos ese privilegio.
El cazador y el salvaje de elite empiezan a debatir con los Kantus.
Wrilog – Hudag, has de recordar que fue gracias a su majestad que una vez mas estamos librando esta guerra. Además esta será una buena oportunidad de enviar a mis mejores cazadores para infiltrarse a esta ciudad. Podemos rastrear rutas seguras para debilitar los soportes de todo el lugar.
Taerok – Esta en razón el cazador. Es mas sensato buscar el punto débil de los humanos, antes de poner en peligro a la Reina. Aunque no le parezca a la tribu de Hudag, nosotros nos mantendremos ante la orden de Aztak. Yo poseo el mayor numero de unidades de infantería. Apoyaremos el frente.
Y por ultimo el Domador de bestias.
Wild’jaw – Tres decenas de Corpsers salvajes, diez Corpsers adultos, cuatro Brumaks y obviamente todos nuestras demás bestias, armadas y listas a la orden del General.
Y antes de terminar, otro Shaman habla confirmando.
Deakryd – Si así se han llamado a la guerra, mi tribu invocara a los pies de Sera a la guerra. Los incontables enjambres de Serapedes al servicio del Alto mando, General Aztak.
Aztak – Que así se haga entonces. Todos los lideres movilicen sus tribus en posición. A mi orden derribaran los muros de la funesta ciudad. Que descansen las unidades una hora.
Los jefes de las tribus obedecen la orden del General y se retiran. El guardia Real se acerca al General.
Guardia – Algo le mantiene preocupado, mi señor.
Aztak – Quizás. Me preocupa la fulminación del plan. Aun no tengo noticia alguna de Arkatos ni de Nahrek.
Guardia – El teniente y su hermano son de la mejor elite de la Horda. Pero haberlos enviado a Ginesa por el paso de agua les debió haber causado dificultades.
Aztak – No solo ellos, también arriesgue a quien llevaban.
Cuartel Ginesa – 4:01 a.m.
Control – Se demoro bastante Zulú.
Zulú – Seguimos investigando a los alrededores tras la extracción. Confirmamos la zona. Hay bastantes Infames dentro de la ciudad, solicitamos una inspección a fondo de los sectores, control.
Control – Permiso concedido. El equipo medico espera en el hangar este.
Zulú – Comprendido.
Control – Zulú ¿A tenido contacto con Alpha?
Zulú – Negativo. Pensé que ya estaría en el cuartel. La ultima transmisión fue hace unos quince minutos.
Control – Seguiré intentado comunicarme. Control cambio y fuera.
Edificio en ruinas de Ginesa – 4:05 a.m.
Un soldado corre por entre el edificio en ruinas, agitado. Solo con su pistola en mano, algo le asecha; una sombra busca desde el techo, asomándose por la vigas de acero escondiéndose y viendo el miedo de aquel hombre atrincherado.
El hombre mientras retrocedía para ponerse contra la pared, se tropieza, dándose cuenta que era un cadáver, brutalmente asesinado a cuchilla, por el cuello. Asustado, su respiración se torna mas deprisa mientras el miedo le invade, aun así ve una salida. El cadáver del otro soldado poseía una radio, lo toma rápido con la esperanza de pedir ayuda a control. Velozmente se pone de pie, con la radio, para escapar de la habitación.
Un eco metálico se oye dentro del edificio. El sonido de cuchillas siendo afiladas en las paredes y las pesadas pisadas moviéndose por todo el lugar. El humano, estaba aterrado, se podía oír los latidos rápidos del hombre ya condenado.
Sin perder mas tiempo se mueve de ahí, mientras busca la frecuencia de control. Pasa por el umbral de la puerta, para pasar a una habitación inferior y salir del edificio, lamentablemente cuando pasa por el umbral es aplastado por quien le daba caza. En ese momento se le va de las manos la radio que traía y la señal distorsionada da a la señal de Control. Aun seguían intentando comunicarse con Alpha.
El hombre yacía boca abajo, lastimado de su columna, pero toma con esfuerzo su pistola y ni siquiera contempla la idea de mirar cuando dispara, quitándoselo de encima. La sombra nuevamente de un salto regresa al techo abierto para esconderse otra vez.
Desesperado y sin sentir las piernas, se arrastra por la radio que había saltado de sus manos. Jadeando por el miedo y la adrenalina, estira una de sus manos para alcanzarlo pero una cuchilla le atraviesa la mano, clavándose en la piedra impidiéndole que se moviera. Grita el humano pero estaba demasiado lejos de cualquier otro, como para ser oído.
Tranquilamente la sombra baja hasta el piso, camina hacia su presa, mientras esta trataba de sacar su mano. Simplemente le da la espalda al humano y recoge la radio, una vez que se levanta, con la otra mano saca con fuerza su cuchilla, desgarrándole la mano al que estaba en el suelo. El soldado miraba su mano desecha gritando y maldiciendo.
Finalmente da la cara Arkatos, limpia su cuchilla, la envaina; caminando rápido, toma del cuello al humano y lo azota contra la pared viéndolo cara a cara. El Kantus le quita el casco al humano para que respirara mejor. Responde escupiéndole en la cara pero parece que solo le hace gracia al enorme Kantus.
Arkatos – El enemigo yace internamente, humano. ¿Qué harás ahora que esta tu vida en mis manos?
Soldado – Aunque yo muera te encontraran, maldito.
Riendo contesta.
Arkatos – Esa es la idea. Pude ver que estaba tratando de hablar con los de tu especie. Intentaba usar esta radio. Pues bien... llámalos.
Soldado – Bastardo, no puedes obligarme.
Arkatos – Cierto. Te ofrecía tu vida a cambio pero si tu deseo es morir, puedo triturar tu mandíbula con mi propias manos, come suelos.
El Kantus cambia su mano del cuello a la cara del hombre, empieza a enterrarle las garras en las mejillas, empieza a sangrar un poco cuando se detiene.
Arkatos – O quizás se mejor arrancarte la lengua y dejar que te desangres. Suena entretenido intentarlo.
Aprieta mas las mejillas para abrirle la mandíbula y con la otra mano toma la lengua, enterrándole las garras ya perforándosela. El solado, veía su lengua estirarse más y más, grita pero solo se oía balbuceo. Arkatos se detiene en seco, le suelta la lengua y toma nuevamente la radio poniéndosela en la boca.
Arkatos - ¡Llámalos!
Soldado de Alpha – Con... control. Aquí lo que queda de Alpha. El sector E... esta comprometido... Maldición. El enemigo esta dentro de la ciudad, repito el enemigo esta dentro. ¡Cough, Cough! Es solo un....
Le quita de la boca la radio y la destroza con la mano.
Arkatos – Bien. Déjalos que piensen que somos numerosos. Me gustaría llamar su atención. Después de todo ya se donde esta la Reina.
Soldado de Alpha – Aunque vayas por ella, esta bien guardada en el cuartel, además ya saben, que estas aquí. Ahora vendrán por ti, maldito hijo de pu..
Antes de que terminara la frase, nuevamente toma su lengua y se la arranca.
Arkatos – Una disculpa. ¿Intentabas decirme algo? A es cierto, gracias por decirme su ubicación exacta. Puede que vengan aquí por mi pero lo mas seguro es que ya me allá ido. Solo por la información te dejare con vida, cabe en ti detener la hemorragia si quieres vivir, humano.
Lo deja caer al suelo y vuelve a desaparecer de un salto. El humano se queda solo, con la boca llena de sangre y ya habiendo perdido la movilidad de sus piernas, esperando su muerte lentamente.
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Post by Spiritual Gaia on Mar 3, 2013 6:32:54 GMT 2
AH que me dejan troleada. No importa de todas formas se me ha ido escribir despues de aqui lol. Aunque ya falta poco para el termino. Eso queda claro ¿no?
CAP 22
Sacro Asesino
Cuartel Ginesa – Celdas principales – 4:07 a.m. La joven Reina yacía sobre su celda sentada, tranquila y a la espera de su oportunidad; aun sentada en el rincón mas oscuro de su celda. Amyra estaba casada, no había domino nada tras su captura, pero no podía flaquear en ese momento. Fuera de su celda se encontraban dos Guardias armados, que apenas se dirigían palabras entre ellos dos, después de los guaridas, estaba la puerta blindada que requería la llave maestra para abrirse. Fuera de la puerta estaba todo el Comando, continuamente en movimiento, y al centro donde suele estar la comandante Alrich, que en esos momentos estaba fuera de servicio para descansar, en su lugar el Teniente Rocher por esos momentos.
La joven sabia que era imposible escapar con todo ese movimiento y además con sus manos presas con cadenas pero aun mantenía la esperanza. Aun poseía las llaves que le quito a Brenda Alrich mientras le lastimaba. Y a pesar de todo, aunque contristada por lo que había hecho, estaba mas preocupada por las consecuencias de sus actos. Si quería remediarlo no podía perder mas tiempo dentro de esta celda. Puesto de Avanzada Locust – 4:34 a.m. Aun de pie el General desde lo alto con su montura contemplando toda la ciudad que daba bocanadas de humo a sus alrededores y todas las trincheras a su frente llena de sus tropas. Todo el tiempo se mantuvo preparando para el momento correcto pero aun esperaba una señal del Comandante. Una hora completa sin saber nada de su esclava ni del escuadrón de Nahrek. Temía lo peor ya pasada la hora pero otras monturas mas empezaron alzarse junto a la suya. Taerok – Infantería preparada y lista para el combate. Wrilog – Cazadores en posición. Iniciamos la transferencia de datos recopilados a la tribu de Wild’jaw
Wild’jaw – Afirmativo, enviando unidades a verificar e iniciar la perforación. La transmisión se abre oyendo a todos lo jefes afirmando. Boomers – Grash y Mog en posición.
Gog’dem – Todas las tribus del Este en posición General. ¿Esta seguro de esperar al Sumo sacerdote? Aztak – Lo suficiente para dejarle en sus manos la vida de la Reina. No fallara. Gog’dem - Que asi se haga General, pero no podemos esperarlo eternamente. Gog’dem cambio y fuera. Transmisión entrante – Unidad de Reconocimiento. Francotirador Locust – Mi señor, hemos detectado varias explosiones en los últimos minutos. Daños por Granadas y munición pesada. Aztak – Necesito una confirmación mas clara. Francotirador – Negativo. La zona esta comprometida, hay humo cubriendo el lugar. Humanos desviados de sus rondas ya entablaron combate. Recomendamos enviar tropas aéreas de exploración. Aztak – No hay tiempo para eso. Comuníquenme con Gog’dem. Gog’dem – Ya he oído General, cuales son sus ordenes. Aztak – Necesito ir por mi mismo. Moviliza al ejercito ¡Ya! Gog’dem – Comprendido. Sin perder mas tiempo y muy preocupado, el General se dirige por las columnas del humo para acercarse lo mas sigilosamente posible. Cuartel Ginesa – Celda de prisioneros - Veinte minutos antes – 4:14 a.m.
Empieza a oírse un alboroto al otro lado de la puerta blindada. Los soldados de Guardia empiezan a ponerse nerviosos e igual la joven Reina, quien se asoma por los barrotes para oír mejor lo que sucedía. Los soldados de dejan de mirar a celda de la Reina y abren ligeramente la puerta blindada para ver que sucedía. Distraídos Amyra aprovecha para quitarse las cadenas que tenia, con la llave que robo. Abre la puerta con fuerza noqueando a uno de los soldados y se abalanza sobre el otro golpeándolo con una de las cadenas. Antes de que se levantara el otro toma el arma de segundo, matándolo.
Es sorprendida por el segundo que aun no estaba muerto, y la toma por los brazos, la joven Reina pelea por liberarse, escapándose con facilidad por la fuerza superior que poseía. Lo deja en la pared y antes que se pusiera de pie toma el arma, que tiro, abriendo fuego. Conserva el arma, viendo que ya había revelado que estaba libre. Cierra la puerta blindada viendo que varios humanos venían por ella. Pone el arma y los cadáveres para darle preciados segundo buscando otra ruta para salir. Busca por el techo o el piso, encontrando un pequeño conducto donde ventilaba aire. Para su sorpresa alguien venia por ese camino también. Toma rápido la del otro Guardia, apuntando al conducto esperando a que saliera. Estaba muy nerviosa con la puerta blindada, a su espalda, tratando de abrirse. Cuando la reja de la ventilación se sacude, Amyra lista para golpear con el mango del arma a quien saliera. Se abre finalmente y justo antes de encestar el golpe, se detiene en seco mirando la marca Locust en un hombro. Ciba – No hay tiempo. Quiere escapar por aquí es mas seguro. La Reina se queda pasmada, era una niña con el símbolo de su pueblo. No supo que hacer pero Ciba al ver que la puerta estaba abriéndose ya, la jala del brazo para que se metiera a la ventilación. Alrich entra a la habitación, furiosa. Alrich - ¡¿Dónde esta esa, perra?!
Rocher – Debe estar en los conductos de Ventilación. Es la única salida por aquí. Alrich - ¡Encuéntrala, Rocher! Rocher – Si señora. Amyra se arrastra por el metal siguiendo a la niña pero no puede evitar saciar su curiosidad. Amyra - ¿Por qué haces esto, humana? Ciba – Pero si tu también lo pareces. Amyra – Te he hecho una pregunta. Ciba – Me trajo, Aztak. Amyra – ¿Aztak? Espera ¿sabes donde esta Arkatos? Ciba – No lo se. Me separe del que me estaba cuidando. Me dijo que te buscara. Normalmente los conductos de ventilación son fáciles.
Amyra – Maldición. Espero que sepas lo que haces, humana. Ciba – Nada mas lo hago por que me lo pidieron, si no te hubiera dejado atrás. Amyra – Escucha. No se por que el General te envió pero no confió en ninguno de tu especie. Ciba – Pues su majestad, no todos somos iguales además me estas siguiendo. Se que los Locust están feos pero tu eres diferente. La Reina no podía sentirse menos que indignada por la situación, pero la cicatriz que tenia la niña en su hombro, le resultaba enigmático, pues asi se les marcaba a los humanos esclavos pero el que la niña este al servicio de su propio General, Amyra no sabia que pensar. Hangar Este – Cuartel Ginesa – 4:15 a.m. Un soldado cubierto de sangre, corre a ponerse a cubierto, disparando detrás de el. Su respiración era rasposa y grave curiosamente. Enfrente de el varios humanos cubiertos por las cajas del hangar le disparan. Se van acercando aun que unos pocos caen por las balas. ¿Por qué se disparaban? Luinha - ¡¿Que mierda esta pasando aquí?! Se oye el grito del sargento al otro extremo del Hangar. Soldado – Es el enemigo, sargento. Se infiltro aquí con una civil para llegar hasta el Cuartel directamente. Luinha - ¿Se infiltro? ¡Como carajos se infiltro, si teníamos a la mayoría de unidades a los alrededores! Soldado – Lo que quedo de Alpha informo a Control que el enemigo había entrado ya a Ginesa. Fuimos a investigar el Sector E pero solo encontramos al pelotón Alpha muerto. Control inicio el Protocolo máximo, y desplegamos todas las unidades en los Sectores. Luinha – Retiren el Protocolo. Alrich ya esta de mal humor con esos disparos, y ya debe estar con la Reina. ¿Cuántos hay infiltrados? Soldado – Solo es uno, sargento. Luinha - ¿Y a que esperan para matarlo? ¿Navidad? Soldado – Se a atrincherado en los tanques de combustible. Si abrimos fuego la base se ira al infierno, sargento. Luinha – Maldición. Tiren grandas de lacrimógeno., después entren. Soldado – Afirmativo.
Soldados empiezan acercarse y a tirar las grandas. El que estaba atrincherado empieza a toser quitándose el casco tratando de respirar. Krashtar no para de toser y trata de cubrir se con el vendaje ensangrentado que tenia. Se pone su gogles para evitar el humo e inmediatamente toma de nuevo su arma mientras con la otra mano tapaba su boca con las venda ensangrentada. Soldado – Pelotón listo para aproximarse. Los humanos lo rodean, acercándose agachados tratando de evitar las balas que salían cuando Krashtar podía ver a alguien por el humo. Ya estando cerca de Granadero Salvaje algunos hombres van desapareciendo entre el humo. Luinha – Maldición que esta pasando. ¿Ya lo habrán matado? Dame mi maldita arma. Inútiles. Luinha se pone el casco y se adentra al humo, se acerca a uno de sus hombres viéndolo de lejos. Luinha - ¿¡Donde esta!? Soldado – Cuarenta pasos a Noroeste de mi posición. Luinha ve algo detrás del soldado. Una sombra mucho mas grande que su hombre se acerca por detrás sin que se diera cuenta. Luinha - ¡Cuidado! Dispara alertando a su hombre. Apenas dándose cuenta su hombre voltea rápidamente a punto de soltar la munición pero le es atravesado por el pecho extraviándolo nuevamente en el humo. Luinha sabia que le dio pero las balas fueron repelidas por un blindaje. Inmediatamente sale del gas que ya empezaba a irritarle los ojos. Luinha – ¡Mierda, mierda, mierda! ¡¿Que fue eso?! Eso no era un Locust normal. ¡Avisen a Alrich! Es peor de lo que pensábamos. Tanques de combustible – Hangar Este – 4:21 a.m.
El tiroteó se calma momentáneamente, Krashtar se sienta contra las cajas, respirando profundo y presionando sus profundas sus heridas. El humo aun no se dispersaba lo suficiente pues los humanos había lanzado numerosas granadas evitando que escapara.
Alguien cae al suelo, frente de Krashtar, disipando el humo por la caída y se levanta mostrando su gigante estatura. El comandante había dado con el Granadero finalmente. Arkatos – ¿Donde esta la niña? Krashtar – Escapo mientras distraía a esos come suelos ¡Cough, Cough! Desconozco si fue hacia nuestra majestad. Arkatos – Entonces démosle mas tiempo. El Kantus tira hacia el Granadero varios cartuchos de munición que le quito a sus victimas, con una risa fría los toma Krashtar, recargando su arma nuevamente. Krashtar – Comandante, en esta posición hay seis tanque de combustible. Si volamos esta base, los humanos tardaran en reagruparse y serán presa fácil para la Horda. Arkatos – Hasta que saquemos a la Reina de aquí. Krashtar – Comprendido. Aun tengo una carga de explosivos. Es mi ultima, no creo que se lo suficientemente fuerte para crear la reacción en cadena necesario para volar la estructura. Arkatos –No, pero será suficiente para darle la señal al General. ¡Coloca las cargas! Sala de Comando – 4:24 a.m.
Transmisión a Comando – sargento Luinha. Luinha – Eh comandante. Tenemos un problema, hay a un bastardo realmente grande dentro del hangar. No podemos disparar, los tanques pueden hacer estallar la base. Alrich - ¡Madito seas, Thomas! Me dijiste que ya habías acabado con ellos. ¡Rocher! Envía dos de nuestras silvers, harán de cubierta para que se acerquen, a esa posición. Rocher - ¿Cómo paso desapercibido? Luinha – No tengo idea. Es bastante ágil esa maldita larva. Además esta blindado. Debe ser uno de sus sacerdotes por la forma que tenia. Ya asesino a varios de mis hombres el maldito. Alrich – El fue quien causo que Control iniciara el protocolo y asi dispersar la mayoría de mis unidades de esta posición. Es muy listo ese hijo de perra. Y lo que nos queda es capturar y tener a su Reina con mi arma apuntándole a mi cabeza para que se calme. Rocher – Si ya hay varias unidades investigando los conductos. Alguien más le debe estar ayudandola.
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Post by xenovelvet on Mar 5, 2013 2:50:25 GMT 2
Jajajajaja no te dejamos troleada strd y yo siempre estamos al pendiente de las actualizaciones siempre las leo aunque esta vez y ha pasado que actualizas antes de que alcance a postear ya que aveces leo y despues vuelvo para postear pero nada de dejarte troleada ok?
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Post by srtd on Apr 17, 2013 23:52:12 GMT 2
Bueno estaba esperando a que se acumulen 3 caps para comentar de golpe, pero al parecer si seguia haciendo eso debia esperar muuuuucho mas je je je je.
En fin, puedo decir que las cosas dieron un gran giro, el hermano sobreviviente que ahora se unio a Arkatos hicieron un gran trabajo poniendo las cosas patas arriba y Ciba esta rescatando a la reina. Cuando la reina este a salvo Aztak podra dirigir el ejercito Locuts en una gran invacion indetenible.
En fin Lifa espero por la conti.
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