Si, viene todo dentro del bestiario que subi y para ver el aspecto de los personajes principales, estan en alguna parte en mi galeria XD pero bueno continuamos. Solo Los Locust salvajes son los que no unclui tanto en el bestiario pues dentro de la historia salen mucho despues como ya estuviste leyendo CAP 19
Bienvenida a su RealezaGinesa – 11:12 p.m.
Amyra despierta mareada por el golpe, apenas se levanta. Estaba sucia y llena de sangre su traje y cabello. Se da cuenta de grilletes en sus manos, dentro de una celda bien iluminada y totalmente cerrada del exterior. La intensa luz lastimaba sus ojos anaranjados.
Las puertas de barrotes se abren rechinando. Pero Amyra apenas podía ver quien era.
Alrich – Déjeme darle la bienvenida a su Realeza... ¡Abran la puerta!
Alrich entra soltándole un fuerte golpe dejándola en el suelo otra vez.
Alrich – Eso fue solo por mi hermano, maldita. Todavía falta todas las demás vidas que arrebataste.
Amyra - ¿Qué arrebate? – Contesta con voz fría y limpiando la sangre de su labio
Alrich – ¿O que ya se te olvido a todos los inocentes que mataste?
La Reina ríe un poco y se levanta.
Amyra – Quizás hayan sido inocentes, quizás no. Pero hay que admitir que tu raza se lo a ganado.
La comandante suelta otro golpe y la patea ya en el suelo. Amyra continua levantándose.
Amyra - ¿Qué ganar lastimándome, solo una peor muerte?
Alrich – ¡Ho! discúlpeme majestad por no ser su favorita pero déjeme informarle que no hay ninguno de sus asquerosos hijos para ayudarla aquí.
Amyra – No... Es cierto... No hay nada ni nadie que pueda ayudarme pero nadie te podrá ayudar a ti de mi.
Alrich suelta otro fuerte golpe regresándola al suelo. La joven Reina escupe un poco de sangre de inmediato con su muñeca se limpia, quedándose ahí.
Alrich – No te preocupes. Acabaremos antes con los tuyos, tu puedes estar para el final. Viendo como nos servimos en plato frió a todas tus larvas.
La mujer dispone a retirarse pero nuevamente oye reír a la Reina, en el suelo.
Amyra – “Plato frió” ¿Sabes por que libramos esta lucha? ¿Por qué iniciamos esta guerra? ¿Por qué lucharemos hasta que los exterminemos? Es cierto que fue mi madre, la reina Myrrah quien la inicio pero ¿Por qué murió hasta el final?
Alrich – Estaba desesperada. Quería la superficie para escapar de los lambent.
Amyra – Lo estaba. ¿Sabes quien causo la infección en nuestro pueblo matando a millones bajo tierra?
Alrich - ...
Amyra – Fueron ustedes, los humanos.
Alrich - Ni siquiera sabíamos de su existencia.
Amyra – No pero su deseo incansable de poder con las guerras por su preciada emulsión causaba daño en el antiguo pueblo. Explotaban el líquido sin saber que hacia estragos en nuestra especie. Al principio Myrrah busco la ayuda de algunos de ustedes para salvarnos. Pero nos rechazaron, para seguir matándose entre ustedes y matar millones mas de nosotros. Era dominar la superficie dando más tiempo a encontrar la solución a la infección o morir intentándolo; pero un nuevo genocidio ocurrió gracias al científico llamado Fénix. Nuestra especie casi pereció pero henos aquí aun sobreviviendo y demostrando nuestra superioridad a la suya.
Alrich – Eso ya veremos cuando te vean presa tus queridas bestias.
La comandante sale de la celda y sus guardias la cierran tras de si y antes de retirarse vuelve a oírla, mientras se refugiaba en la sombra de su celda.
Amyra – Antes de que te vayas. Quiero que sepas que yo poseo sangre de mi pueblo.
Finalmente se fue sin saber a que se refería con ese ultimo comentario, pero regresa a la sala de operaciones.
Luinha - ¿Qué tal fue tu primera cita?
Alrich – Tal y como lo esperaba. Es una bastarda arrogante. La verdad no me sorprende.
Rocher – Se merece un descanso comandante. Ya nos a dado esta victoria. Nosotros haremos de guardia.
Alrich - Pero antes una comida caliente y cervezas para todos. Nos lo hemos ganado.
Todos en la sala exclaman alegres por la victoria.
Ciudad Ginesa – Canales de agua. 11:34 p.m.
Varias sombras avanzan cautelosamente por entre el agua, que les llegaba a la cintura.
¿*? - Oigan no veo nada y tengo sueño.
¿-? – Cállate, No podemos descansar ahora. Si nos ven todo se vendría abajo.
¿*?_ Entonces me dormiré mientras aun no llegamos.
¿+?_ Deja que duerma un poco, Krashtar. Aun es demasiado joven para seguir con este paso, hermano.
Krashtar – Para mi es peso muerto lo que llevamos. Me serviría de bocado al menos.
Nahrek – Déjate de tonterías. Aun nos falta un kilómetro para salir a la superficie.
Krashtar – Cualquier salida es buena. Por que llegar exactamente hasta el punto de los planos.
Nahrek – Porque es una orden directa y es donde hay mas actividad humana. Los escritos mencionan que cerca de donde vamos es donde esta mas reforzado.
Siguen avanzando por el agua en silencio. Solo viéndose los anaranjados ojos de todo el grupo, brillando.
Nahrek – Hermano, si salimos con vida prometo que dejare las armas.
Krashtar – Por favor. Estamos en la cima con poder y ¿deseas dejar de exterminar a estas basuras come suelos?
Nahrek – El poder no es de mi interés es solo que no deseo contemplar la muerte, hermano.
Krashtar – Sobrevivimos a Cébeles, sobreviviremos a esto.
Nahrek – Si. Tienes razón quizás se inquietud.
Campamento de observación. Fuentes de agua Ginesa – 00:46 a.m.
Un pequeño pelotón haciendo guardia entre las fisuras subterráneas.
Soldado – ¿Te has enterado? ¡Tienen a la Reina!
Soldado Reconocimiento – ¿Las larvas tienen una Reina?
Soldado - ¿Qué pensabas que salían de la tierra? Claro que tienen un Reina, debe ser gigante y tan horrible como ellos.
Soldado R. - ¿Cómo la capturaron?
Saldado – Parece que la comandante tenía un plan muy bueno para hacerlo. De eso no estoy enterado. Después de todo a mis primos los mandan al frente a matar larvas y a nosotros trabajo de reconocimiento y guardia en los canales.
Soldado R. – Si no hacemos nosotros el trabajo ¿Quién lo haría?
Mientras charlan los soldados, varias sombras empiezan a rodear su pequeño campamento.
Soldado R. – No sientes como que te están viendo aquí a oscuras.
Soldado – Solo tú, acosándome.
El soldado se levanta tomando su rifle y camina hacia las distintas puertas de agua. Se va acercando más a la oscuridad solo para curiosear.
Soldado R. – Oye por cierto te iba a pregun…
Y se da cuenta que ya no estaba. De inmediato se levanta nervios y alerta a los demás en el campamento. Se acerca a la Radio para comunicarse con Comando. Apenas iniciando la búsqueda de frecuencia el tiroteo empieza cuando ven al enemigo.
Soldado R. – Maldición, maldición. Donde está la frecuencia
Operaciones – bzzzz Bzzzzz Bzzzzzz aqu…… bzzzzzz ¿Reconocimiento bzzzzzzos bzzzzzzzcibe?
Los soldados van cayendo de a poco aunque el punto de estratégico les da ventaja algunos Locust los habían rodeado aprovechando la oscuridad.
Soldado R. – ¡Vamos, vamos, vamos!
Operaciones – Bzzzz… Reconocimiento ¿cuál es su estado?
Soldado R. - ¡Sí! Aquí reconocimiento. Están usando las vías subterráneas. No parecen ser muchos pero están usando túneles que no estaban en los planos.
El soldado recibe una bala por un pulmón atravesándolo.
Operaciones - ¡Reconocimiento!
Soldado R. ¡Hijos de pu…. Necesitamos que traigan refuerzos! Están en el nivel 4 de las plantas de agua. ¡Cough Cough! (se oyen disparos a lo lejos)
Operaciones – ¡Todos los controles en luz amarilla! Aguante soldado un pelotón ira a su posición.
Soldado R. – Ni en broma llegaran a tiempo pero ganaremos tiempo Comando. (Se abre fuego con un arma menor)
Se interrumpe la comunicación.
Por algunos minutos más el enfrentamiento continuo, ambos escuadrones ya tuvieron bajas.
Nahrek – ‘¡Informe!
Centinela – han sido cinco bajas, mi señor. La humana esta saludable.
Krashtar – Raspones habituales, hermano. Debemos seguir.
Nahrek – Apresuren el paso. El factor sorpresa ya no es algo con lo que contamos.
La decena de Locust se moviliza más rápido ahora que ya saben su posición. Lo único que les quedaba era llegar lo más cerca posible de la superficie.
Puesto Locust – 01:03 a.m.
Creando trincheras para protegerse. En todo el piso cerca de las tiendas estaba repleto de Locust heridos que habían sido tratados. Los Kantus rondaban constantemente revisando y usando sus dones para revitalizar a los casi muertos. El sumo sacerdote ronda igualmente como sus hermanos revisando el número de bajas y de heridos. Aún tenían bastantes unidades listas para volver a enfrentarse pero no sin la aprobación del general.
Una vez termina su deber el comandante regresa a donde el General.
Aztak - ¿Aun piensas sacrificar algo para salvar a tu Reina?
Arkatos – Si.
Aztak – Bien. Pero puede que no solo saquemos a la Reina, también podemos acabar con el pilar que le queda a la humanidad. Sus nombres son:
- Brenda Alrich, la comandante que está dirigiendo todo y por supuesto quien planeo la captura de Amyra. Mis exploradores me informaron que es uno de los pilares principales de lo que queda de los humanos. Es el objetivo primario.
- Víctor Rocher: Teniente de Alrich. Es de aspecto joven pero es el encargado de toda la ingeniería y defensa estratégica de esta ciudad. Si lo asesinamos nuestras unidades tendrán vía libre para entrar a su fuerte.
- Thomas Luinha: Sargento de Artillería. El más experimentado de los tres. Ha sobrevivido desde el día E. Se ha resistido a su eliminación todas estas décadas.
Arkatos – Estos son nuestros objetivos. ¿Qué deseas que haga?
Aztak –Necesito que desde adentro actúes.
Arkatos - ¿Actuar desde dentro? No puedo ver la forma de entrar a su propia base.
Aztak - Es lo que aun no he podido prever del todo. Necesito decirte que ya había enviado a un escuadrón por las vías subterráneas. Usa la ruta que ya limpiaron y asístelos. Ellos tienen los planos para entrar a la ciudad. Eso te ayudara para llegar ahí pero solo tu iras. Llevar más unidades arriesgara tu presencia.
El enorme Kantus se pone su casco acorazado y se marcha inmediatamente.
Cuartel Humano Ginesa – 00:45 a.m.
La comandante va muy molesta hacia nuevamente hacia el frente de la celda donde estaba la Reina. Pero no la ve.
Alrich - ¡Hey! ¡¿Dónde está la Reina?!
Un eco inmediatamente contesta.
Amyra – Yo no me he ido a ninguna parte.
Dos destellos anaranjados aparecen del rincón oscuro de la celda. Y se acercan hasta la puerta mostrando a la joven Reina.
Alrich - ¿A quién has mandado por ti?
Amyra – No sé a qué te refieras con esas palabras.
Alrich - No te hagas la tonta. Tus larvas vienen por ti. Tú debiste ser quien les dio la información exacta de este lugar.
Amyra – Deja de balbucear humana. Yo no he hecho nada y mucho menos puedo hacerlo aquí dentro.
Mientras esta agarrada de los barrotes de su celda viéndola cara a cara. Alrich la toma con una mano de su ropa para advertirle.
Alrich – Si tus larvas llegan hasta aquí, voy a sacar a mis hombres y volare en mil pedazos este lugar contigo dentro. Reza que no lleguen, su real majestad.
Y se retira Alrich, pero Amyra aprovecho el acercamiento agresivo de Alrich para robarle su salida. Esperará hasta que el momento sea oportuno.
Sala de operaciones 01:12 a.m.
El Teniente estaba en la sala de operaciones cuando llega Luinha.
Luinha - ¿Para qué me has levantado?
Rocher – Escucha esto.
Pide a uno de comunicaciones repetir la repetición del contacto anterior.
Grabación – “¡Sí! Aquí reconocimiento. Están usando las vías subterráneas. No parecen ser muchos pero están usando túneles que no estaban en los planos.”
Luinha – ¿Túneles nuevos? ¿Qué no se cansan de ser tan bastardos? ¿Ya lo sabe Brenda?
Rocher – Afirmativo. Interrogo a la Reina brevemente pero esto parece ser otro plan desesperado por rescatarle.
Luinha – Hpmh. Yo me encargo Teniente. Prepara mis hombres. Iré por mis armas y un trago.
El sargento se retira y el Teniente se acerca a sus soldados de operaciones, empieza a correr el llamado de los hombres de Luinha. Una decena se alisto y se acercó a la sala de operaciones. Y Luinha, llega con una botella en la mano y un cigarro en la boca, en la otra mano estaba su rifle. Se pone enfrente y empieza hablar mientras tomaba un trago.
Luinha – Señoritas. Tenemos Locust metiéndose a sus faldas y no es broma. Saben que tenemos a su adorable Reina y la quieren de vuelta. Por supuesto no vamos a dejar que se lleven a su alteza.
Un soldado pide permiso.
Soldado – ¡Señor! ¡¿Si me tiran una bala tengo permiso de lloriquear y decirle que le amo?!
Inmediatamente pone el cigarro entre los dedos y lo señala con ellos.
Luinha – Permiso concedido cadete. Solo déjeme una carta con corazones y se la mandare a su madre difunta, idiota.
Soldado – ¡Gracias, Señor!
Luinha – ¿Alguna otra pregunta penosa y retardada que deseen decir antes de que les metan una bala por su parte intima? ¿No? Muy bien. Pues señoritas es hora de matar larvas.
Todos los soldados incluidos Luinha salen de inmediato hacia las instalaciones de agua.
Y si todas las criaturas vienen en el juego tambien. (trilogia) Y obviamente se sabra mas de la historia que a veces hago referencia jugando o viendo videos XD