Historia interactiva: El juego.

[Wolfmarian]

*Dark hunter*

Continuo mi caza, voy adentrandome en el nido... solo oigo ruidos de xenomorphs amenazandome, pero no consigo verlos, creo que ellos me observan pero... con un cierto miedo desde la pasada caza de mis compañeros, me dirijo al pasillo que conduce hacia la reina veo que el pasillo se empieza a estrechar debido a el nido que los aliens construyeron en pocas semanas consigo ver una piel en el suelo ... uno de ellos ya ha nacido y es reciente... . 3 aliens me rodean llagado a la sala Nº 23 de la piramide 1 por alante y otro por detrás, lo primero que hago es desplegar mis wristblades y coger mi glaive , logro cortar las piernas del alien que viene por delante con la glaive extendiendo mi brazo lo mas lejos posible, me alejo de ahi cuando 1 de los 2 aliens se abalancea sobre mí quedandose en mi espalda a la vez que pierdo la glaive del impacto, pude darme la vuelta y luchar contra el 2º alien que me atacaba por detrás teniendo una breve y dura pele con solo uno de mis brazos activo por suerte era el de la wristblade solo pude esquivar los ataques que me hizo él con sus garras a continuación pude sorprenderle con un movimiento raro que hice gracias a mi adrenalina y pude partirle la mandibula y a la vez atravesarloe el pecho con.

El otro bicho que estaba en mi espalda me clavaba las unñas cada vez mas fuerte como en venganza de la muerte de su "amigo" supongo que quería torturarme, pensé que podría hacer para quitarle de mi cuerpo solo se me ocurría doblarme y volverme a incorporar muy depresisa y dar brincos pude quitar su brazo de el mio y poder cogerle del torax y llevarlo al suelo, el se levantó muy deprisa , tan deprisa como pudo. Nos encaramos yo alcé mi wristblade, él rugió con rabia, sin pensarselo él me atacó como pudo con sus garras, yo pude esquivarlas con un gran salto que me colocó detars de él, el me vió y me enroscó en su cola y no pude escabullirme de esa enorme cola entonces el jugaba con su boca interior rozandome el biohelmt creo que se le ocurrió quitarmelo con su brazo derecho yo rapidamente se lo arranqué de cuajo con la wristblade, el me apretó lo mas fuerte posible con su cola hasta llegar al dolor insoportable... a continuación él decidio tirarme al suelo como yo hice con él entonces puso su cola por detrás de mis rodillas y empujar hacia él y me caí.

[Wolfmarian]

*Kanon*


Resaca

'En medio del espacio. por donde nadie pasa dos veces. El 'Electra' formaba parte de la patrulla de la nada. Soporte de varias esquadras, para allanar el tema si habia que tomar tierra con el resto del contigente. Una fragata médica y de rehabilitación 'La Splenia', un carguero con barracones de lujo para colonos y otro de Core Systems, con ingenieros, abrazafarolas y demás fauna.

Por la mañana. Desayunando en la nave de la Armada 'Electra'.


Seguimos todavia con el horario terrestre arcaico. Si estamos en el espacio, aqui no hay sol que salga...Ni meridiano para que lo cruce.... . Continuaba Graves.

Que me dejes en paz de una vez!!!. El horario no es una cuestion que me importe a dia de hoy! lo que si me jode es que me despiertes de madrugada y que lleves 20 minutos sin parar de hablar. Colega! que todavia no he encendido los motores! Deja que pille ritmo que estoy muy cansado, he dormido mal.

Claro...dijo Graves sabiendo que tenia respuesta.

Si no te pusieras hasta las patas de eso, y no te provocaran 'tus sueñecitos' no estarias tan jodido ahora que empieza la jornada. Además Didier quiere hablar contigo y de tus amistades de juventud...

El perro ese!!!! Se sabe de memoria mi Historial, hasta que nota saqué en fisica en preuniversirario. Bueno, pero no es mal tio... a ver que quiere ahora.

Despacho

Lo se todo. Dijo Didier, asi que dejate de bobadas y empieza a confesar que llevamos casi una hora aqui.

Impavido, eso era yo, cuando se puso serio callé. 45 minutos yendome por las ramas.

Y aqui llegaba Didier como un mercancias de los de las leyendas terrestres, esta vez sabía que le iba escuchar. se habian acabado las gilipolleces.

Mira, el problema que se está liando en los Sistemas Unidos es de niveles astronómicos. De verdad, el cataclismo es cercano y la Guerra Civil es inminente. Se está buscando el minimo desencuentro para el Golpe de Estado final, la mínima chispa lo hará. La última excusa es el 'affaire' del planeta Arctuarian, el Vera...el carguero. Quiza salgamos en minutos hacia allí, no es seguro. Pero en lo que concierne a ti...

Vuelves a 'Deseo', Kanon.

[Wolfmarian]

*Dark hunter*

BOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOM !

pero que....... ? !!


Suena una explosión en Deseo, por la que me desperté de mi sueño, y voy persiguiendo a los señores de la droga... aquella explosión.... era un tiroteo de bandas... los señores de la guerra contra los "mxc".

Llevo persiguiendolos varios días... por la razon de divertirme un rato haciendo lo que más me gusta.
Al cabo de varias horas observando veo que los señores de la drgo son los mas fuertes ya que vencieron a la otra banda, solo tuvieron una baja.
Se marchan corriendo de ese lugar, como si escapasen de los latigazos de su amo. Escápan en unos 'coches' como los llaman ellos. Suerte que no iban a toda velocidad y pude perseguirlos por los tejados.

Era muy largo el camino, de una punta de la cuidad a otra. Me cansé de correr tantos minutos ( unos 20 ) y pude subirme en un coche que había detrás de ellos y a continuación con mucho sigilo me subí en el coche de ellos sin que se daran cuenta. Otros 10 minutos en el coche hasta llegar al escondrijo.

[Wolfmarian]

*Krokodil*

La oscuridad propía de las construcciones abandonadas se vío violada por linternas manulaes y potentisimas lámparas instaladas por la policía. El espectral silencio del lugar había sido sustituido por las constantes ordenes en voz lata y el distante chillido de las siernas; tanto de patruyas como de ambulancias.

Como el caballo de batalla del sistema judicial arcturiano; Grant Jameson estaba obligado a asistir al siniestro evento que había tenido lugar en las abandonadas vías del tren subterraneo y contemplaba con desagrado la escena que se mostraba ante él.

Dos personas; ambas archivadas en el expediente policial como ladrones y contrabandistas de poca monta se hallaban ante los ojos del joven policía. El primero era un hombre de mediana edad, te blanca y cabello corto estilo militar, su craneo se hallaba destrozado en la región frontal, pero su rostro aún era reconocible, también presentaba una enorme herida a la altura del pecho. El segundo sujeto era un joven, de no más de veinte años; su cuerpo se hallaba despedazado de miembro a miembro y presentaba la misma herida extraña en su cráneo.

Personal forence deambulaba al rededor de los cuerpos; sacanado fotografías, registrando la posición de los cuerpos y realizando anotaciones. Grant solo observaba, el era una recluta reciente y se hallaba en el rango más bajo de la jerarquía policiaca; no estaba capacitado para trabajar con los cuerpos o discernir lo que había ocurrido en la escena del crimen, mas su joven mente conjeturab a cerca de las atrocidades ocurridas en el lugar. Su tarea era sencillamente vigilar que nadie más se acercase a la escena del crimen.

Grant dió un paso hacia atrás, llevandose una desagradable sorpresa; había pisado una sustancia extraña, gelatinosa y pegajosa - '¿Qué es esto?'- pensó el policía, mientras que con su linterna arrojaba algo deluz a los oscuros túneles abandonados. Curioso como siempre; sentía el deseo de internarse en el laberinto subterraneo, pese a todo el esfuerzo realizado por su miedo para evitar que lo hicese.


******



El primero; mi primer hijo yacía inmovil en el suelo, en espera de su anfitrión. Lo contemplaba con felicidad pues implicaba una nueva etapa en mi desarrollo como individuo. Habría ahora de crear mi propia familia.

Al ser una primeroza era incapaz de poner huevos a la misma velocidad que una Reina mayor ; lo cual en estos momentos habría de resultar ventajoso, dado que no tenía ayudantes para dispersarlos a lo largo de la cámara de nidación, pero esa situación habría de cambiar pronto.

Escuchaba a los humanos hacer un verdadero escándalo en la lejanía; ¿Debido a la muerte de dos de lo suyos talvez? En esta ocasión no era capaz de ir por ellos, toda mi atención se centraba en el huevo que acababa de depositar y en como logaría hacer que el producto encontrase un aftirión viable sin revelar mi presencia.

Conseguir al primer guerrero nunca era fácil, mayoritariamente por la debilidad propia de las primeras etapas de nuestro desarrollo. Me enfrentaba a un dilema; podía enviar al transportador de mi material genetico hacia donde se hallaban los hombres, realizando cualquera que fuese su labor no muy lejos de aquí o bien esperar la oportunidad de que alguna presea solitaria se acercase lo suficiente a mi nido; me decidí por lo segundo dado que los bípedos racionales parecían hallarse en un grupo relativamente grande. Serían mis deciciones las que definirían el futuro de mi familia y especie en este mundo.

[Wolfmarian]

*Wolfmarian*

La joven reina miraba con satisfacción y orgullo su primer huevo. Su orgullo era equiparable a cómo una madre humana observaría, por primera vez, a su hijo recién nacido. A su primer hijo.....
El huevo había sido puesto hace poco, y ya se habían desarrollado en su base, los tentáculos que habrían de sujetarlo al suelo y cuya función principal sería la de conseguir los nutrientes necesarios para sustentar con vida a dicho huevo....y para mantener a su vez a la otra pequeña vida que este guardaba en su interior. Ambos organismos se consolidaban en una simbiosis perfecta.

La joven reina había dado el primer paso precedente a la creación de una nueva vida. Su material genético o esperma se encontraba en aquella pequeña criatura que contenía el huevo.
Altair acercó lentamente su cabeza hacia el huevo, y lo rozó con delicadeza. Este tembló suavemente, y la pequeña criatura de su interior se movió por primera vez.
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Mi mundo vibró y me despertó. Me sacó de la oscuridad. Me sacó de mis sueños.
Sueños que representaban una serie de imágenes muy débiles. Imágenes que me resultaban familiares, pero que no entendía. Eran recuerdos de paisajes oscuros, fríos y asimétricos. Recuerdos que no eran míos, como si perteneciesen a una vida anterior.
Pude sentir mi cuerpo con claridad por primera vez.
Mis arácnidas patas se movieron de forma espasmódica, en respuesta a la llamada de mi mundo, un lugar que pude observar con detalle por primera vez....

Me hallaba flotando en un viscoso líquido amniótico.
Estaba rodeado de rosadas y blanquecinas masas orgánicas, y mi espalda estaba adherida, mediante una serie de pequeños nervios, a otra masa rojiza aún más pequeña, situada justo debajo de mi cuerpo.
Esa masa, asemejando a una placenta, me enviaba la mayor parte del alimento que necesitaba, y de esa misma masa, se habían originado las vibraciones que me habían despertado.
Era un lugar tibio y agradable. Proseguí un rato inmóvil, percibiendo con mis todavía adormilados sentidos todo lo que me rodeaba.
De repente mi mundo volvió a vibrar, despertándome por completo. Las paredes que representaban los confines de mi hogar se trasparentaron un poco, dejándome ver el misterioso exterior, más allá del lugar en el que me hallaba.
El rostro de una enorme criatura me miraba. Supe instintivamente que era mi madre, mi protectora.
Con un movimiento más fuerte de mi cola prénsil logré posicionar todo mi cuerpo, para así, poder observarla mejor. Se estaba comunicando telepáticamente conmigo. Me estaba expresando un gran cariño y amor maternales.
En esos momentos de mayor lucidez pude notar que mi cuerpo era diferente. Era ya por completo independiente y autónomo del organismo que me sustentaba. Por instinto supe que estaba preparado para llevar a cabo la mision que la naturaleza me había asignado.
Mi madre me decía que aún habia que esperar. Que el momento todavía no había llegado, pero que no tardaría en comenzar....
Lentamente, el relajante stásis volvió a impregnar el líquido en el que flotaba y contribuyó a que me fuera adormilando de nuevo....
Esperar....sí, debía esperar....ganar energía....soñar de nuevo, por última vez, antes de abandonar ese cálido mundo para siempre.

[Wolfmarian]

*Rhadamantys*

Acompañados por el ruido del motor de la nave de descenso 15 hombres se encontraban colocados ordenadamente en bancos a lo largo de todo el compartimiento de pasajeros iluminado solo por una luz rojiza. Las 15 personas en la nave formaban el pelotón B, del escuadrón de Tácticas Especiales y Servicio de Rescate. Los 15 hombres bajo el comando de Dieter estaban sentados muy callados. Todos usaban uniformes negros, armaduras de protección y guantes negros. Todos ellos tenían sus cascos negros sobre sus piernas. Los pensamientos de Dieter fueron interrumpidos cuando la nave hizo una parada repentina. El piloto a través del intercomunicador.

“Hemos llegado sargento”

Dieter golpeo fuertemente la pared dos veces para indicar al piloto que abriera las puertas traseras, lo que hizo el piloto. El pelotón B rápidamente se colocó sus cascos, tomó sus armas y salto fuera de la nave de descenso. Dieter era el ultimo, tomando un rifle de asalto M41 del estante y colocándolo sobre su hombro.

El exterior era oscuro, relativamente. Durante la noche, la luces masivas de todos los medios de comunicación, unidades policíacas. Dieter caminó hacia su pelotón, con su casco bajo su brazo izquierdo. Su pelotón esperaba cerca. Había alrededor del área una docena de patrullas despidiendo sus luces características sobre el área acordonada.

Alcanzando a su pelotón, Dieter fue saludado por un hombre alto, con cabello rubio arenoso. Comisionado Thompson.

“Comisionado” Dieter hablo fuertemente. “¿Que tenemos aquí?”

“No recibimos ningún detalle cuando nos desplegaron”

Dieter dando la espalda solo exclamó “Nosotros nos haremos ahora cargo de esto comisionado”

Dieter camino hacia su pelotón y dijo a su pelotón prestar atención.

“Bien, escuchen soldados. Tenemos una situación muy delicada en nuestras manos. Tenemos aquí nuestro carguero, a las 0130 de esta tarde recibimos un informe sobre el accidente de este carguero. No sabemos las causas, ni las perdidas. Nuestro objetivo es recuperar lo que sea que este transporte llevaba hacia Deseo. Entraremos en la nave y revisaremos rincón por rincón hasta que encontremos lo que buscamos, sean cautelosos. Nos veremos en la nave de descenso en 2 horas”

[Wolfmarian]

*Alga A. Gatito o Sparticus*

Brillos mortales despuntan al alba...
A la orilla del desfiladero, cuatro figuras permanecen inmóviles mirando fijamente el refugio de los monstruos negros, a través de sus macrovisores, pueden ver que la lisa superficie de la estructura bulle de actividad... un solitario guerrero trata de contener a los bichos que salen de sus obscuros agujeros en pos del intruso... los dientes chocan contra la armadura, el yelmo golpea, los músculos se tensan, los dedos resbalan, el cañón es arrancado y la lanza arrebatada... las navajas cortan garras y colas... éstas a su vez arañan y pinchan la carne... la sangre salpica y quema... la persistencia acaba con la resistencia y finalmente el cazador, exausto cae... los bichos lo toman y lo llevan dentro del nido...

Los cazadobres sobre el risco, comienzan apresuradamente el descenso y se dirigen hacia la enorme estructura resinosa que domina el valle...

[Wolfmarian]

*Kanon*

No muy lejos de 'Deseo'


Resonaban las risas. Saga disfrutaba:

¿Cómo? se preguntaba Saga, y proseguia...Que los Marines y los de Core están jugando a los experimentos con el acido de esas criaturas? Volvía a reir.

Imbeciles! nos llevan casi 100 años de retraso. El ácido...jajaja, el ácido...menudo misterio! Si supieran...Mira chico, A dia de hoy nosotros sabemos controlar a esas criaturas, partimos de una reina con unas caracteristicas geneticas concretas, que no son muy frecuentes, pero salvajes, quiero decir, nosotros su codigo genetico no lo hemos tocado. Los hemos educado digamoslo así, con alguna trampa, pero bueno. Ya han hecho algun 'trabajito' para nosotros con resultados impresionantes. Fidelidad, eso son. Cuantas cosas desconoce la gente y que grande es el Espacio.

Por cierto, dijo Saga, muy agradable tu visita...pero no la estropeemos con numeros e impresos, demos una vuelta por el complejo y tomemos una copa, mientras te enseño esto...ehmmm te llamabas?...

Winston es mi nombre. Respondió el ínclito visitante.

Eres muy joven no? repuso Saga. Sí, la verdad apenas tengo 20 años. Me metí en esto gracias a mi padre, trabajo para él , no me ha ido mal...

Sonrió Saga. Ven, demos un paseo por las instalaciones.

Saga y Winston caminaban hablando animosamente por las instalaciones donde a cada paso Winston se paralizaba y sus ojos no daban credito a lo que veia. Saga se hinchaba de gozo.

Ven te los enseñaré. De muy cerca. Dijo Saga.

Se introdujeron en unas estancias de extraño diseño, destacaba el escaso dispositivo defensivo del lugar, no parecia que guardaran algo peligroso. Llevó a Winston a una gran sala. De la que aparecieron del fondo oscuro lentamente 4 figuras que parecian venidas del infierno, oscuras. Apenas hacian ruido y lentamente a la orden de Saga se acercaron pero guardando distancia....

Acercate Winston, pero no te aproximes mucho. No tengas miedo, y no des un paso atras...

Winston apenas podia moverse pero dio unos pasos hacia delante y podia ver cada vez con mas claridad a las criaturas...

Lo ves!

Mientras Saga reculaba hacia atras y cruzaba lentamente el umbral de la puerta. Winston permanecia estupefacto.

Extendió el brazo al interruptor y dijo: Por cierto Winston, le has dicho a tu padre que hoy no ibas a cenar en casa?.

Cerró la puerta. Winston no tuvo ninguna oportunidad.

[Wolfmarian]

*Krokodil*

Dediqué una mirada a los huevos y reflexioné; ya eran siete de ellos ahora, de los cuales dos se encontraban abiertos ahora; ambos a causa de la ingenuidad del anfitrión de uno de ellos, un animal peludo y cuadrupedo denominado "perro" por los bipedos racionales. Erlik, mi segundo hijo había logrado afianzarse con firmeza al rostro de la bestia, mas Wolferr quien había sido despertó por accidente, se encontró sin anfitrión.

Wolferr o mejor dicho, el portador de Wolferr se había perdido en el laberinto de túneles que conformaban esta red subterranea de la colmena humana. En esta etapa inicial yo tenía muy poco control sobre ellos, quizas era mejor de esa forma, dada mi inexperiencia. El instinto me reconfortaba informandome que los portadores tenían lo necesario para sobrevivir y hallar un anfitrión. Confiaba en Wolferr desde el momento en que lo deposité; su genética singular lo convetirían en uno de mis mejores guerreros, más estando en una etapa tán temparana de su desarrolo era vulnerable.

Volví mi atención a Erlik, su pequeño cuerpo comenzaba a tomar la forma de un embrión desarrollado; sería cuestión de muy poco tiempo para que naciese, su presencia habría de serme muy util, dada la ahora urgente necesidad de anfitriones y acomodo de los huevos.


******


Las sombras tradaban en ceder el paso a la luz en Arcturus; los días usualmente duraban dos o tres horas menos que las noches durante el invierno. En algunos delos barrios más cercanos al centro de la ciudad la oscuridad parecía reticente a marcharse, dadas las imponentes sombras de los colosales rascacielos y complejos urbanos.

Bajo las construcciones de mayor tamaño, desprovistos casi de de toda luz, se hallaban los barrios mas pobres de la capital arcturiana. Edificios biejos, algunos aún construidos con ladrillo y cemento.

Desde la ventana de un antigu complejo de apartamentos, un hombre miraba a la calle; sus ojos se hallaban rojos por no dormir y si deseaba descanzar lo suficiente habría de apresurarse antes de quel turno vespertino comenzase, pero algo el en el mantenía su mirada firme en hacia el exterior: La curiosidad

Grant Jamieson, pese a su profesión siempre fue un hombre imaginativo, curioso y soñador. Resultaría irrisorio y bobo para sus compañeros el ponerse a pensar en una babasa rara que pisó la noche anterior pero... el hecho era que él jamás había visto cosa semejante en su vida ye eso había clavado una diminuta espina en su mente, una de la cual no había podido liberarse. ¿Volver al lugar? No, no podía, debía descanzar, debía prepararse para la siguiente tarde.

[Wolfmarian]

*Wolfmarian*

Habían pasado aproximadamente unas cuatro horas desde que la oscuridad de la noche se habia ceñido, como un enorme manto, sobre la superficie del planeta.
Debido a la lejanía del Sol, las noches Arcturianas eran por lo general frías. Pero ahora, dada la estación, eran especialmente gélidas, de hasta incluso varios grados bajo cero. Mucha gente evitaba salir a estas horas y permanecía al abrigo de sus casas para protegerse de este frío.
Un viento helado soplaba entre las ahora, casi desiertas, calles de la ciudad. Todo parecía muy silencioso y sereno. En una noche como esta, nadie podría imaginarse la calidad de los acontecimientos que se iban a desatar pronto. Acontecimientos tan sorprendentes que sacudirían como nunca la superficie del planeta hasta sus cimientos.
En la zona central de la ciudad se alzaban los barrios más pobres, en donde la mayoría de las casas todavía estaban construidas a base de ladrillo y cemento. La gente de esta parte de la ciudad sobrevivía a duras penas con trabajos muy duros y poco remunerados, o bien mendigando por la calles. Muchos se convertian en ladrones y se dedicaban al contrabando. Era una zona muy poco segura....
Una mujer estaba asomada a la ventana de un viejo edificio de apartamentos, situado en la calle Chesterfield. Su pelo era largo y de color negro y sus ojos eran de un castaño oscuro. Su edad posiblemente no sobrepasaba los 30 años.
Su mirada se perdía en el estrellado cielo nocturno. Sus pensamientos no dejaban de darle vueltas una y otra vez a la sobrecogedora imagen de la bestia negra que había visto en la parte abandonada del metro....
Nunca había visto algo tan increibe en toda su vida. Parecía tratarse de una criatura enorme, mucho más alta que un ser humano, equipada con dos pares de brazos, una boca armada de dientes afilados y una larga cola.
En su mente se dibujaba una y otra vez la imagen de sus atacantes, totalmente destrozados por la criatura, y no dejaba de preguntarse cómo pudo ella salir con vida de esa extraña situación....estaba asustada. Más de lo que lo había estado nunca. Era un miedo primario. Un miedo a lo desconocido.....

Un hombre de pelo corto y castaño había entrado en la habitación. A juzgar por su aspecto, parecía muy mayor, y su pálida cara daba a entender que estaba enfermo.

-¿te encuentras bien Eileen? Hace días que me tienes preocupado....
-Deberías estar acostado papá. No creo que sea bueno para tu enfermedad que te pasees por la casa con este frío.
Henry thompson entró en la habitación de su hija y se sentó en la cama.
-Me da la sensación de que me estas ocultando algo....
Eileen soltó un profundo suspiro y se dió la vuelta. Sus ojos se encontraron con los de su padre, pero enseguida desvió la mirada.....Sí, había muchas cosas que le había estado ocultando estos meses.
Para empezar, la habían despedido de la fábrica y se había visto obligada a caer en la prostitución para poder mantener a su padre y pagar las facturas del apartamento. Por otro lado estaba el asunto de la criatura.....No podía contarle ninguna de esas cosas. Es más, en el caso del monstruo no creía que su padre fuera capaz de entenderla (de hecho, ni ella misma era capaz de comprender lo que había ocurrido esa noche).

Henry bajó también la vista -¿Estas inquieta por los rumores que se están oyendo últimamente?
-¿El de la muerte de esos dos hombres? -preguntó Eileen con un deje sombrío en la voz.
-Mismamente. Según la policía los individuos eran contrabandistas, ladrones...ya sabes, esa clase de gente. La versión oficial es que un loco homicida perpetró esos asesinatos. -Eileen no pudo evitar dejar escapar un gruñido sarcástico- Pero en mi opinión, creo que muy bien pudo ser un miembro de la banda de "los serpientes". Pudo ser perfectamente una pelea entre bandas contrabandistas.

"Los serpientes" se trataba de una famosa banda de contrabandistas y ladrones, cuyo escondite parecía hallarse en alguna zona de la parte abandonada del metro. Su líder, Kane (también apodado "el cobra") tenía fama de ser un hombre duro, y con razón. Se trataba de un preso escapado de la prisión nacional de Arcturus. Eso era todo lo que Eileen sabía.

-Parece que por fin el gobierno va a tomar cartas en el asunto -señaló, intentando desviar de su mente los pensamientos que la habían estado atormentando- Se ha anunciado la venida de una nave de marines coloniales.
-Ya veremos como arreglan la situación -declaró seriamente Henry- yo hace años que dejé de creer en este corrupto gobierno.....
Henry se levánto y caminó hacia la puerta....
-Desde que murió tu madre y tu hermano se fugó de casa, he intentado por todos los medios que seas feliz, puesto que tu eres lo que más me importa en este mundo. Pero lo único que te he podido dar es esta pocilga de apartamento y una vida precaria.....
Eileen estaba muy seria. Henry llegó a la puerta y antes de cerrarla señalo...."y muchos apodan Arcturus como la segunda Tierra"....
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En un rincón de las profundidades del metro un grupo de vagabundos estaba reunido en torno a un fuego para calentarse. Eran siete hombres, todos ellos con ropas raídas y viejas.
Bebían cerveza barata y comían lo que habían podido mendigarse ese día, lo cual no era mucho: unas latas de judías y unas salchichas pasadas de fecha....por no hablar de los restos que habían sacado de la basura.
Uno de ellos,(un hombre de piel morena) dió una voz al compañero que tenía al lado:
-¡Erik, viejo sarnoso devuélveme esa salchicha que me has mangado!
Un hombre mayor, de tez blanca y larga barba rubia, ataviado con un largo gabán y una bufanda le respondió en un tono sarcástico.
-¿A mi que me cuentas bribón?, esta salchicha es mía, la conseguí yo. Agénciate una propia.
-La comida ha de ser repartida equitativamente entre todos truhán, pero tú no haces más que robar parte de ella y escondértela para tí y para tu pulgoso perro.
Erik tiró su botella furioso hacia la pared, provocando que estallara y manchando de cerveza a uno de los hombres, quién se levantó y amenazándolo gritó:
-¡Ya basta, maldita sea!¡estoy harto de vuestras malditas peleas! -estaba borracho- ¡apartaos de mi vista u os juro que los dos os quedáis sin vuestra parte a partir de ahora!
Erik obedeció y se levantó de un salto, echando a andar hacia las escaleras mecánicas que bajaban hacia el interior del metro. Siempre tenía escarceos con Jack, nunca se habían llevado bien....
Tras caminar un rato decidió buscar a Toby, su perro.
-¡Toby muchacho! ¿donde te has metido?. Tengo una suculenta salchicha para tí. Anda, sal de donde quiera que estés.
Se fué internando cada vez más y más en el metro.
-Maldito perro pulgoso, donde diablos se habrá metido ahora -pensó. Normalmente el perro solía ausentarse internándose en el metro y volviendo al rato a su lado. Algunas veces incluso llevaba en la boca alguna rata que había cazado. Pero aquél día el perro no había vuelto y Erik había empezado a ponerse nervioso, pues le tenía mucho cariño a su fiel compañero de cuatro patas.
-Ese si que es un verdadero amigo -pensó- no como los otros con los que convivo. Nunca me juzga por lo que soy ni por lo que hago.....
De repente oyó un chasquido. Parecía provenir de uno de los cuartos de baño públicos. Pensó que podría ser Toby, y silvó llamándolo, pero no respondía....así que entró en el oscuro cuarto de baño para buscarlo....
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Al despertar y salir de mi cómodo y húmedo hogar me había visto privado de un anfitrión. Uno de mis hermanos se había anticipado a mí y había conseguido impregnar a un animal de cuatro patas.
No tuve más remedio que lanzarme a explorar los oscuros y misteriosos confines de la naciente colmena en busca de un anfitrión viable, puesto que ya me era imposible volver atrás.
Había estado moviéndome velozmente entre conductos de ventilación, siempre con todos mis sentidos alerta, para detectar cualquier traza de una posible presa.
Al cabo de lo que parecieron horas pude oír un sonido, cuyo significado era incomprensible para mi. Era algo así: "-¡Toby muchacho! ¿donde te has metido?. Tengo una suculenta salchicha para tí. Anda, sal de donde quiera que estés." Salí de los conductos y pude distinguir a lo lejos a una criatura, diferente de la otra a la que había visto en la colmena. Aquella criatura andaba a dos patas. La evalué con cautela desde la distancia.....por su constitución parecía un anfitrión viable.

La criatura (o como posteriormente supe que se llamaba su especie, el humano), parecía muy nerviosa y nada peligrosa. Una presa perfecta....
Pero aún así el instinto me aconsejaba obrar con cautela, así que con un rápido movimiento de mis patas me escabullí por una puerta cercana, escondiéndome en una pequeña y oscura habitación. Una vez dentro, hice ruido para llamar la atención del humano.
Pude oir como se acercaba a la puerta y emitía una serie de sonidos agudos.
Le estaba llevando donde quería. Lejos de cualquier ayuda, hacia su fin. Mi misión estaba a punto de realizarse....
Trepé al techo justo cuando el humano abrió la puerta.
Entró lentamente en la oscura habitación, tanteando las paredes y con cautela. Parecía no poder ver en la oscuridad, y lo más importante: no podía verme a mí....
Desde donde estaba podía oler el fuerte olor de la cerveza, que impregnaba su enredada barba.....esperé a que se colocara debajo de mí....pero, justo en ese momento....¡el humano miró hacia arriba!
Debido a la oscuridad, al principio, no pudo detectarme bien...pero al cabo de un rato sus ojos se agrandaron y su boca se abrió, a punto de soltar un grito....pero este quedó ahogado.
Lo último en apagarse en el letargo que estaba sumiendo rápidamente su cuerpo fueron sus ojos, que aún miraban sorprendidos lo que le estaba ocurriendo...

[Wolfmarian]

*Kanon*

Ayax

Me la suda!, no quiero saber nada más. ire porque tengo que ir, pero no me hace ninguna gracia. Que demonios querran de mi esta gentuza en Deseo, cuando todo el mundo se moviliza para Arcturian. A si que no me interrogues mas, porque no se nada más ni quiero saber.

Vale perdona, hombre! dijo Graves casi molesto.

Sabes, continuó, en la Estación militar 'Nemesis', la que controla varios sistemas planetarios, y entre ellos el sector en el que está Arcturian hace dos días se empotró una nave como la nuestra, la Executor, no llegó a reventar simplemente en el muelle de amarre se estrello, sin control. parece ser que unos piratas la asaltaron y mutilaron a los marines y tripulación, a todos, es muy raro que unos piratas se atrevan a hacer eso. Aunque a dia de hoy cualquier cosa es posible.

Basta ya! Te digo que no quiero saber nada más! Que pasa me junto con el que se sabe todos los chismes? contestó Kanon.

Bueno kanon, hemos de despedirnos, partimos hacia Deseo mañana, ya han lelgado los nuevos y el despliegue es tal que hasta a mi me han asignado el mando de una escuadra de Noobs.

jajajaja! No te los cargues antes de dar un tiro eh? Buena Suerte Graves, espero que nos veamos pronto. Un abrazo compare.

El Carrusel

A la mañana siguiente, Graves ya se habia ido cuando me llamaron, no se porque motivo tuvieron que adelantar la salida 2 horas. En una lanzadera, me llevaron a la 'Dioscorides', una nave no convencional, mucho más rapida y apenas 30 hombres, en apenas 4 dias estaríamos en el planeta Ayax, donde asentaban Paradiso y Deseo, y otras no 'tan' prosperas. Otras naves tardarían 20 días.

Llegamos al planeta Ayax, nada que reportar. Ni ganas.

Tuvimos que aterrizar a varios kilometros al sur de Paradiso, nuestro destino.

No se que follon de clima, o eran disturbios? no sé. Tranquilamente por el etrreno algo abrupto, de monte bajo y densa vegetacion esporadica. 2 vehiculos de asalto, el viaje con algún sobresalto por el terreno. Nada más, de repente, una fuerte explosión, nos saco del ensoñamiento e hizo sonar los seguros de los pulse rifles.

[Wolfmarian]

*Rhadamantys*

Los mismos problemas de cualquier ciudad por más que la tecnología se había desarrollado las ciudades de hoy presentaban los mismos problemas urbanos de hace 100 años.

Orbita de Arcturian

Un cuarto oscuro y la presencia de varios hombres transpirando tras los monitores era el escenario dentro del “Vera”.

-“No hay señal de nuestro cargamento Sargento”-

-“Sigan monitoreando la superficie, alguna señal de lo que buscamos tiene que aparecer. Monitoreen las 24 horas.”-

Fueron las órdenes a bordo del “Vera”. El sargento tenía la tarea difícil en sus manos, sin embargo no podía hacer más hasta que algo sucediera en la superficie de Arcturian. Solo quedaba esperar alguna anomalía y seguir disfrutando del infernal clima dentro del “Vera”.

[Wolfmarian]

*Krokodil*

Erlik el veloz, Erlik el grande, mi primer hijo era ahora un depredador funcional; su piel oscura y resistente denotaba el inicio el estado de madurez, más la cubierta suave y flexible sobre su cabeza indicaba que aún no hera un adulto. Wolferr el poderoso también había llado un anfitrión, un anfitrión humano en su caso. Mi segundo hijo se hallaba mucho más lejos de mi, de lo que me gustaría, pero me hacía saber que se hallaba seguró, su segundo nacimiento estaba muy proximo.

Mi atención se volcó en Erlik, lo mire y el me devolvió el gesto. Con lentitud extendí uno de misbrazos más largos para acariciar su cabeza, sensación que le resulto agradable. Leal hasta el último instante, mi hijo goxaba de cualquier demostración de afecto por parte mía. Intercambiamos miradas nuevamente y le hice saber que el hallarme inmovil me resultaba muy incomodo, dada mi curiosidad y deseo de expansión familiar. La labor de Erlik, sería explorar y traer anfitriones al nido, le instrui realizar su primera busqueda de inmediato y el asintió sin miramientos.

El dimorfismo entre mis hijos y yo es muy amplio, a esta temparana edad ya les dubplicaba el tamaño y en mi adultez sería tres veces mayor que ellos, también era mucho más robusta y pesada. Su ligereza y agilidad les concidia habilidades que yo solo podía soñar con tener, como escurrirse por lugares estrechos. Comenzaría con una ronda exploratoria y si una presa disponible era hallada sería capturada. La versatilidad de mi hijo le permitio tomar un camino más corto a la superficie de la ciudad.

Al igual que nostoros, el ser humano es una criatura constructora que altera su medio en busca de mejores condiciones de vida. Las estructuras de origen humano, sin embargo, son muy distintas a las nuestras; su origen no es orgánico, son discontinuas, heterogeneas y llenas de angulos rectos. La zona escogida para la exploración poseía construcciones más bien bajas, pero autenticos colosos eran apreciables en la distancia.

La vida en esta gran colonia era marcada por una actividad constante; cosa común de los grandes conglomerados humanos, siempre parecen tener algo que hacer. La actividad en la ciudad había pasado pese que para el tiempo de la madurez de Erlik, la noche había vuelto acubrir esta región del planeta con su manto de oscuridad. Los anfitriones abundaban, si era astuta y administraba correctamente mis recursos sería capaz de ser la progenitora de una colmena estable por muchisimo tiempo, o eso cería, dado que la combatividad de la raza humana me tomaría por sorpresa.

En esta primera expedición decidí ser precabida, ordenando a Erlik atacar únicamente a presas aisladas. Tras dar un par de vueltas por las laberinticas calles, mi primogenito encontró un lugar donde la actividad era casi nula. una construcción de aspecto decaido dominaba el paisaje; en su fachada se hallaban escritas las palabras "Orfanatorio Nicolás".

El sonido de cristales rompiendose, aniquiló la quietud de aquella noche; murmullos podían ser escuchados en todo el edificio y el raquitico cuerpo admistrativo se veía ahora enfrentado a una tarea inusal.

Victimas del escándalo, la pareja de directores despertó de su sueño. La ciudad era insegura, hombre y mujer prefirieron observar por la ventana del segundo piso. El panorama que hallaron era misterioso y atemorizante, la puerta de entrada al orfelinato llacía en ruinas y la calle lucía vacía.

- "Calma alos niños y llama a la policía Rose, iré a hechar un vistazo"

- "Mejor esperemos arriba Ed, no hay mucho que podamos hacer"

- "Puff, seguramente fue un drogo loco, un asaltante ya estaría tocando anuestra puerta, solo quiero ver quien es"

- "No tenemos armas aqui Ed"

-"No voy a pelear con es, solo a hechar un vistazo"

A regañadientes la dama accedió, dirgiendose a las habitaciones de los internos. Edward bajo las escaleras portando una lámpara de mano y un pequeño, pero afilado cuchillo de cocina, solo por si a caso. El sudor recorría su piel, estaba nervioso, conocía lo dura que podía ser la vida en esta ciudad y los extremos a los que era capz de llegar la gente por dinero. Lenta y silenciosamente inspeccionó el cooredor principal con su linterna; lo encontró vació.

-'Tuvo que haber sido un bromista estúpido'- pensó él - "Linda, no hay nadie aqui abajo" - gritó a su esposa

- "Deberíamos contratar un vigilante"

-"Sin no fueran tan caros ya tendríamos uno" - "Por suerte el seguro cubre esto"- Finalizo Edward, notificando algo extraño en el suelo, una suerte de babasa extraña. El directro la miro atentamente durante un par de segundos, vió algunas gotas caer del techo, lo cual era extraño. El orfelinato era una construcción arcaica y derruida, poseía múltiples goteras pero... afuera no estaba lloviendo.

Ed tembló ligeramente, el más básico de sus instintos le sugería que había algo más en ese pasillo, con el, algo que le observaba con morbido interés. Con lentitud, fue apuntando su linterna hacia arriba, en su interior el miedo crecía cada instante y cada instante era a su vez prolongado por dicha emoción. Una criatura de pesadilla se encontraba acurrucada en el techo; larga cabeza, dientes afilados, aspecto esqueletico. Increduló, el admistrador se mantuvo inmovil, incapaz de responder al ataque que la bestia lanzó contra el segundos después.

El xenomorfo se arrojó sobre su victima con firmeza y presición; sus potentes brazos sujetaron sus hombros, en tanto que un golpe veloz de la cola inoculó el neurotoxico paralistante en su sistema. Edward scott se vió completamente dominado, el veneno le impedía gritar o moverse, solo pudo observar por unos poco segundos como la criatura lo arrastraba veloz mente fuera del edificio y al interior de una cloaca. Trás aquellas vagas visiones, el veneno le hizo perder el conocimiento.

[Wolfmarian]

*Wolfmarian*


Las diferentes secciones del laberíntico metro Arcturiano fueron llenándose paulatinamente de un cierto bullicio con la llegada de las primeras luces del alba. Aún hacía mucho frío y varias corrientes de aire gélido cruzaban velozmente los diversos túneles del metro, forzando a la gente a abrigarse y a apelotonarse para entrar en calor.
El variado personal que trabajaba en las instalaciones del metro fue ocupando poco a poco sus puestos, preparándose así, para otra larga, dura y rutinaria jornada de trabajo....aunque la rutina habitual se había visto en cierto modo quebrada desde aquello.......
Desde que ocurrieron aquellas espantosas muertes en el metro, los viajeros se habían vuelto más precavidos de lo habitual y ya prácticamente nadie lo frecuentaba por la noche y menos aún la zona más extrema. Ni siquiera los pobres y desahuciados se atrevían a refugiarse del frío en las partes más internas, quedándose la mayoría asentados a las entradas del metro.
Las medidas de seguridad se habían recrudecido considerablemente, y era bastante frecuente ver a muchos policías, armados hasta los dientes, rondando vigilantes por los pasillos del metro.
Una gran masa heterogénea de viajeros de todas clases y condición se empezaba a mover por el metro, subiendo y bajando constantemente de los diferentes trenes, como si de un nido de hormigas organizadas se tratase.....
“Un nido de hormigas”....esa era la metáfora que varias veces había soltado Lou (un miembro del cuerpo de limpieza del metro) cuando estaba en los momentos de descanso, tomando cerveza con los compañeros.
Lou era un hombre maduro y casado. En su rostro se destacaba un bigote negro y vestía un mono de trabajo azul, portando en la cabeza una gorra del equipo nacional de fútbol de Arcturus de quién era forofo.
Su rostro estaba marcado por los años y por el cansancio. Llevaba en su trabajo más de 30 años, y ya le quedaba poco para jubilarse y cobrar la pensión.
Aunque fuese monótono, Lou le había cogido mucho cariño a su trabajo y a sus compañeros, con los que se entendía muy bien. “Me va a costar mucho dejarlo cuando llegue el momento”- pensó con cierto aire de melancolía mientras iniciaba su ruta matutina por los servicios públicos del metro. Aquella mañana le tocaba inspeccionar los servicios de la estación “Chesterfield”, cuyo nombre hacía honor al nombre de la calle por la que pasaba el metro....
Era la zona más vigilada del metro, puesto que cerca de allí se hallaba la zona abandonada donde se habían llevado a cabo esos inquietantes sucesos....
Pasó al lado de dos rudos policías, quienes le pidieron su acreditación y no le quitaron el ojo de encima hasta que Lou se perdió de vista al girar un recodo. A Lou, como a cualquier otro trabajador le habían afectado esas medidas tomadas en el metro. Le perturbaba la presencia de aquellos hombres, la visión de sus armas y sus miradas desconfiadas.....pero la verdad es que eran la única protección posible que podían tener frente a las nuevas adversidades que pudiesen surgir, por lo que era mucho mejor tenerlos de su parte....

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......Una serie de horribles y asfixiantes pesadillas nublaban la mente de Erik. Tenía la extraña sensación de que caía a un pozo sin fondo y una horrible noción de que le faltaba el aire....de que no podía respirar, de que estaba ahogándose....
a intervalos lograba distinguir entre la masa de oscuridad que se arremolinaba en torno suyo, una serie de imágenes de su madre.....
le gritaba...le pedía ayuda desesperadamente, pero ella parecía cada vez más y más distante. Se vió a si mismo como un niño pequeño e indefenso, siendo arrancado de los brazos moribundos de su madre y siendo arrastrado cada vez más al interior de esa profunda y densa oscuridad........

-¡No!...¡No me abandones por favor! ¡¡NO!!....
El tacto repentino y bastante familiar del agua fría derramándose por su cara le hizo despertarse y abrir los ojos de inmediato....la oscuridad se disipó en un santiamén, siendo paulatinamente sustituida por una brillante luz, proveniente de una puerta abierta hacia su derecha....
-¡¡Despierta de una vez maldito!!
Cuando sus ojos por fin se acostumbraron a la luz, Erik miró hacia el lugar de donde provenía esa voz....vislumbró a un hombre vestido con un mono azul. Supuso que era uno de los trabajadores del metro, y que, por la expresión de su rostro no parecía muy contento de verle.
-¡¡Vamos levántate de una vez o te vuelvo a echar agua en la cara!!
Con un cierto esfuerzo, Erik consiguió levantarse....se encontraba francamente mal. No recordaba haberse sentido así desde que se tomó esas dos rayas de cocaína. Tenía todo el cuerpo bañado en sudor, como si estuviese saliendo de una fuerte enfermedad. Sentía la cabeza pesada y dolorida y un extraño sabor en la boca....
Las imágenes de lo que había sucedido estaban confusas e inconexas en su cabeza...no recordaba prácticamente nada de lo ocurrido la noche anterior.
“¿Tanta cerveza he bebido?” pensó poniéndose totalmente de pie.
-¡No somos una acogedora benéfica maldito borracho! ¿por qué no te largas de aquí de una vez antes de que avise a mis superiores?-dijo Lou.
Erik se apresuró a salir del servicio, internándose entre el gentío que empezaba a llenar la estación.

Claramente enfadado, Lou comenzó a limpiar la zona. Ya estaba francamente harto de limpiar toda la basura que dejaban esos vagos borrachos por todas partes. En su opinión deberían esforzarse por buscar un trabajo y ganarse la vida, en lugar de molestar a los trabajadores honrados como el........
De repente, algo oculto detrás de una de las tuberías de la pared le interrumpió el flujo de sus pensamientos, llamándole poderosamente la atención. Parecía una especie de bulto....Se acercó con cautela y tiró de esa cosa......se vió sujetando y alzando por la cola a una criatura que no había visto nunca en todos sus años de vida. No se parecía en nada a las ratas enormes que había llegado a ver por aquellos lugares....Parecía más bien como una mezcla rara de una especie de cangrejo con muchas patas de morfología arácnida.....no parecía tener ojos visibles....
-¿Que...que coño es esta mierda?- murmuró Lou frunciendo el ceño con asco.
Bueno, fuera lo que fuera estaba claramente muerto....
Lou prefirió no avisar a sus superiores por ese descubrimiento....después de todo, prácticamente cada día eran halladas una serie de nuevas especies extraterrestres en el universo, desconocidas por el hombre hasta entonces.
Seguramente no tenía importancia, así que decidió deshacerse del cuerpo de la criatura, y pretender que nada había pasado.

Al girar una esquina Erik se topó con dos policías.
Nada más verle corrieron hacia el y lo apresaron.
-¡¡Que haces aquí, esta es una zona prohibida!!, ¿no se supone que deberías estar fuera del metro con tus sucios amigos?-le espetó el policía más joven.
-Mirale Jonh, tiene toda la pinta de haberse emborrachado.- dijo el otro policía con mirada severa y despreciativa.
-Llevémosle ante el superior para interrogarlo, no me fío de el. Aquí no te puedes fiar de nadie Peter.
Ambos se dirigieron hacia la oficina central del metro, llevando al aún sorprendido Erik sujeto fuertemente por los hombros. No sabía porqué, pero parecía que se había metido en serios problemas.....

[Wolfmarian]

*Kanon*

RESUMEN

Siglo XXV. Los sistemas Unidos y Core Systems, el caos, la corrupción, naves asaltadas y tripulantes descuartizados, los señores de la guerra y la investigación ilícita... Dificil encuadrar aquí a los marines. Pero habrá una guerra, con invitados inesperados. Kanon, nuestro protagonista, un marine de obligación y tormento. ARcturus y la movilización de mucha gente. Pero kanon se dirige A la capital del 'bien' Deseo (subcolonia de Paradiso) por ordenes directas. Donde Kanon nunca quería volver. Y quien es Saga?. Kanon acaba de llegar y deben acudir antes a Paradiso...

Gacelas

''Tuvimos que aterrizar a varios kilometros al sur de Paradiso, nuestro destino.

No se que follon de clima, o eran disturbios? no sé. Tranquilamente por el etrreno algo abrupto, de monte bajo y densa vegetacion esporadica. 2 vehiculos de asalto, el viaje con algún sobresalto por el terreno. Nada más, de repente, una fuerte explosión, nos saco del ensoñamiento e hizo sonar los seguros de los pulse rifles...''

...Fuera!!! Fuera!!!

Rugía la torreta del APC, no sabiamos donde aterrizabamos, los cañones de escaso calibre, abririan fuego contra cualquier cosa que se moviera en 100 metros y midiera más de 50 cm, en estos tiempos si te cargas a un civil, quien te va a juzgar???

Fuera!!! Fuera...desplegaos!!!! Gritó alguien, pero las torretas de los APC ya se habían parado. Nadie en los sensores. Ni estaba el tema como para investigar mucho viendo la raja que habia dejado en el lateral del vehiculo, pero no era muy grave. El otro APC ileso. Nos pareció al principio algo casero, pero al acercarnos bien no conociamos nada que pudiera hacer eso por lo menos aquí. Ningun guerrillero de tres al cuarto ataca a dos APC nuevecitos.

Nos da igual, acampar aquí ni locos, hay que llegar a paradiso y vamos por donde nunca pasa nadie honrado y cuerdo. A pleno campo abierto. Y aquí viven alimañas de verdad. Rapido continuamos el viaje, la entrada a Paradiso será inolvidable.